"Plan, proyecto, doctrina o sistema optimista que aparece como irrealizable en el momento de su formulación" es la definición del Diccionario de la Lengua Española para la palabra Utopía, un término que en realidad hace referencia a un lugar, una isla imaginaria creada por el humanista, escritor y político inglés Tomás Moro (1478-1535) para su obra publicada en 1516 " Libro Del estado ideal de una república en la nueva isla de Utopía" , aunque hoy todos la conocemos simplemente como "Utopía". Utopía es una palabra creada por Moro a partir de dos partículas griegas que unidas significan "Lugar que no existe" o "en ninguna parte" porque describe una isla imaginaria, Utopía, en la que se desarrolla una sociedad ideal y perfecta que no tiene equivalente en nuestro mundo real . Hace más de un año escribí sobre la vida y la obra de Tomás Moro, pero he querido volver sobre el término utopía a raíz de la lectura del libro "Breve historia de la utopía" del escritor y profesor de filosofía español Rafael Herrera Guillén que me ha permitido acercarme a otras islas de Utopía y no sólo teóricas sino también a los intentos de convertirlas en realidad, intentos que en ocasiones han conducido a las sociedades que participaron de estas utopías a algunos de los episodios más oscuros de la humanidad , tal vez porque estas utopías están diseñadas desde la razón y la lógica pero olvidan que el ser humano no es sólo lógica y razón, sino también pasiones, sentimientos y necesidades que no pueden adaptarse a las reglas establecidas en las sociedades utópicas. Y , sin embargo, las utopías son necesarias, tal vez no para plasmarlas tal cual en la sociedad, pero si como estímulo para avanzar y mejorar, porque, como dice el escritor uruguayo Eduardo Galeano "La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte corre diez pasos más allá. ¿Entonces para qué sirve la utopía? Para eso sirve , para caminar"
Siguiendo el texto de la obra de Rafael Herrera Guillén os propongo un viaje por la historia y las ideas para rastrear las diferentes utopías surgidas a lo largo de los siglos, desde la utopía primigenia del Paraíso Terrenal que nos describe la Biblia, a la República utópica del filósofo griego Platón (427-347 a.C), la Jerusalén celeste de la "Ciudad de Dios" de Agustín de Hipona (354-430), la isla de Utopía imaginada por el creador del término , Tomás Moro, que mostraría el camino que siguieron otros utópicos como el filósofo, científico y político inglés Francis Bacon (1561-1526), que llamó a su utopía La Nueva Atlántida, la Ciudad del Sol de filósofo y poeta italiano Tommaso Campanella (1568-1639) que pagaría con la privación de la libertad su pensamiento utópico, la utopía protestante de Cristianópolis surgida de la mente de Johann Valentin Andreae (1586-1654), el primer intento verdadero de llevar la utopía a la realidad en las reducciones jesuitas de Paraguay llamadas también la República Guaraní, las teorías utópicas del filósofo francés Jean Jacques Rousseau (1712-1778) y su defensa del retorno al estado natural del hombre cuando era libre expresada en su obra "El Contrato Social" cuando escribía que "El hombre nace libre, pero en todos lados está encadenado" y las ideas socialistas utópicas surgidas después de la Revolución Francesa de 1789, como el pensamiento del alemán Johann Gottlieb Fichte (1762-1814) y su idea del socialismo de estado donde anunciaba muchos males de las sociedades surgidas de la Revolución Industrial que el tiempo confirmaría, las sociedades justas y el nuevo hombre industrial sobre las que reflexionaba el aristócrata francés conde de Saint- Simon (1760-1825), las sociedades cooperativistas ideadas por el galés Robert Owen (1771-1858) y los falansterios de otro socialista utópico, el francés Charles Fourier (1772-1837) , que prepararían el camino a nuevas utopías como el socialismo científico de Karl Marx (1818-1883), aunque detendré este relato en Fourier, pues el marxismo requerirá en su momento un artículo dedicado en exclusiva a él.
Así que , como podéis ver, tenemos un largo camino por delante y lo mejor será que nos pongamos en marcha y nos subamos a nuestra máquina del tiempo para irnos muy lejos en el pasado, a una época en la que todavía no contábamos el tiempo, un lugar utópico al que llamamos Paraíso Terrenal, que, como escribe Rafael Herrera , es " el mundo más perfecto con el que puede soñar un hombre". El Génesis nos cuenta que Yavé, después de crear a Adán, "Plantó después Yavé Dios un jardín en Eden, al oriente, y en él puso al hombre que había formado" (Génesis 2, 8-9) y a continuación "Tomó, pues, Yavé Dios al hombre y le puso en el jardín de Edén para que lo cultivase y guardase . Y dio al hombre este mandato "Puedes comer de todos los árboles del jardín; más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás en modo alguno, porque el día en que comieres ciertamente morirás"(Génesis 2, 15-18) A continuación Yavé creó a Eva y "Estaban los dos desnudos, el hombre y su mujer, sin avergonzarse uno de otro" porque ninguno de los dos conocía el mal y por ello no podían sentir vergüenza, ni culpa , es el hombre natural , que no ha sido corrompido y al que aspirarán a recuperar los movimientos utópicos. Pero Adán y Eva transgreden la única prohibición de Yavé y prueban, incitados por la astuta serpiente, el fruto del árbol de la ciencia del Bien y del Mal y "Entonces se abrieron sus ojos y conocieron que estaban desnudos; cosieron unas hojas de higuera y se hicieron cinturones" (Génesis 3,7-8) La búsqueda del conocimiento, una constante del ser humano, le hizo perder aquella ingenuidad primigenia , conocieron lo que era el bien y el mal , y vuelvo a las palabras de Rafael Herrera que nos explica que "el ser humano ganó la inteligencia y la libertad pero a costa de perder la felicidad, la inocencia y la eternidad". Adán y Eva son expulsados del Paraíso, condenados a trabajar y a morir "Con trabajo sacarás de ella tu alimento todo el tiempo de tu vida. Ella te dará espinas y cardos y comerás la hierba de los campos . Con el sudor de tu frente comerás el pan, hasta que vuelvas a la tierra , pues de ella fuiste tomado, ya que polvo eres y en polvo te has de convertir"(Génesis 3, 17-20). Se prohibió al ser humano comer del fruto del Árbol de la Vida que le habría conferido la inmortalidad.
Este Paraíso perdido y el deseo de recuperar esa edad dorada de la humanidad será una constante de las utopías que iremos encontrando a lo largo de la historia. Pero los males de la humanidad no habían hecho más que comenzar pues después de la expulsión del Jardín de Edén el mal entrará en la humanidad cuando uno de los hijos de Adán y Eva, Caín, asesine a su hermano Abel. Yavé condena a Caín "Andarás errante y vagabundo sobre la tierra "(Génesis 4 12-13) y Caín se aleja y funda la primera ciudad "Más tarde se puso a construir una ciudad, a la que dio el nombre de su hijo Enoc" (Génesis 4, 17-18), una ciudad fundada por un fratricida, como si se tratara de un símbolo de que todo estado se construye a partir del derramamiento de sangre, como escribía san Agustín en su "Ciudad de Dios" "La primera ciudad, el primer Estado, están fundados por un parricida. Un fratricidio ha manchado también los orígenes de Roma (hace referencia san Agustín al asesinato de Remo por Rómulo, fundador y primer rey de Roma) tan manchados que puede decirse que es una ley que ha de correr antes sangre , allí donde ha de alzarse un Estado" El tiempo pasa y llegamos a otra de las ideas que encontraremos en casi todas las utopías, la corrupción generalizada de la sociedad y su destrucción como único medio para construir una nueva sociedad justa y pura formada por unos pocos elegidos para ser salvados. Volvamos al texto bíblico "Viendo Yavé que la maldad de los hombres sobre la tierra era muy grande y que todos los pensamientos de su corazón tendían continuamente al mal, se arrepintió de haber creado al hombre sobre sobre la tierra y se afligió tanto en su corazón que dijo "Exterminaré de sobre la faz de la tierra al hombre que he formado"(Génesis 6, 5-8) y ya sabemos lo que sucedió luego, Yavé escogió a Noé y su familia por ser los únicos puros de corazón y los salvó ordenando que construyeran un arca donde refugiarse junto con una pareja de cada animal en la tierra , para salvarse del Diluvio que destruiría toda forma de vida.
El Diluvio acabó con la vida de todos excepto con los que iban a bordo del Arca. La sociedad corrupta fue destruida y un nuevo orden nacía con Noé y sus descendientes. Rafael Herrera sintetiza así lo que estará en el origen de todas las utopías, la destrucción del orden social corrompido y la recuperación del Paraíso perdido, el regreso al Jardín de Edén "La historia de la utopía se puede sintetizar - escribe Rafael Herrera - en la permanente promesa de la recuperación en el futuro de un paraíso perdido(el Jardín de Edén) en el pasado mediante la destrucción del mundo presente(el Diluvio)" Y ahora abandonaremos el mundo bíblico para avanzar en el tiempo hasta la Grecia del siglo V a. C donde nacía el hombre que nos iba a dejar la primera obra sobre la construcción de un estado ideal . Hacia el 427 a. C nacía en Atenas Platón(hacia 27-347 a.C) en el seno de una familia de la aristocracia ateniense cuyos orígenes se remontaban nada menos que al último rey de Atenas, Codro (hacia 1089-1068), y también estaba emparentado con uno de los grandes políticos y legisladores de la historia de la ciudad, Sólon de Atenas (hacia 638 - 558 a.C). Como escribe Luciano di Crescenzo(1928) en su "Historia de la filosofía griega" con esos antecedentes era inevitable que Platón sintiera inclinación por la política como él mismo reconocía "Cuando era joven , tuve una experiencia similar a la de muchos otros muchachos de mi edad: pensaba dedicarme a la política apenas estuviera en situación de bastarme a mí mismo", pero la convulsa época que le tocó vivir, con la crisis de la democracia ateniense, la Guerra del Peloponeso entre el 431 y 404 a.C que enfrentó a Atenas con Esparta con la victoria final de esta última y en la que participó como soldado Platón, y la implantación de un régimen oligárquico que sustituía a la democracia llamado el gobierno de los Treinta Tiranos, apartaron a Platón de la política y le inclinaron por la filosofía.
Su vida cambió un poco antes de la derrota de Atenas, cuando hacia el 407 a.C Platón conoce a quien iba a ser su maestro y principal influencia, Sócrates (470-399 a.C). Escribe di Crescenzo que, citando a las "Vidas, opiniones y sentencias de los filósofos más ilustres" de Diógenes Laercio (siglo III d.C), que Platón "a los veinte años se ocupaba sólo de poesía y que un día, mientras se dirigía al teatro para participar en una competición poética , vio a Sócrates que hablaba a un grupo de jóvenes. Entendió de inmediato que aquel anciano iba a ser su nuevo guía espiritual: arrojó al fuego las poesías y empezó a seguirlo" En 399 a.C Sócrates fue condenado a muerte acusado de impiedad y de corromper la moral de la juventud ateniense, aunque en realidad era acusado de difundir lo que eran consideradas ideas peligrosas entre los jóvenes atenienses que no eran otras que enseñarles a preguntar por las cosas y a reflexionar. El pensamiento libre siempre ha sido visto con malos ojos por el poder. Tras la muerte de Sócrates Platón abandonó Atenas y viajó por Egipto para aprender de los sacerdotes egipcios, visitó a los discípulos de Pitágoras (569 a.C- 475 a.C) en Italia y en 388 a.C se estableció en la isla de Sicilia, en la colonia griega de Siracusa donde gobernaba el tirano Dionisio el Viejo (haica 430-367 a.C) donde Platón trató de influir para crear allí el estado ideal que ya había nacido en la mente de Platón y que veremos a continuación. Pero a Dionisio el Viejo no le hizo mucha gracia las ideas del filósofo griego y lo expulsó llegando incluso a querer venderlo como esclavo. Finalmente Platón logró regresar a Atenas donde en el año 387 a.C fundaba un lugar donde sus discípulos podrían reunirse a estudiar y recibir lecciones de su maestro. Éste lugar se hallaba en una arboleda situada al noroeste de Atenas, conocida como los bosquecillos de Academo en honor del héroe mitológico del mismo nombre. Así nacía la Academia de Platón, uno de los acontecimientos culturales más importantes del mundo antiguo.
Mientras, Dionisio el Viejo fallecía en 367 a.C en Siracusa y le sucedía en el poder su hijo Dionisio el Joven (hacia 397- 343 a.C) y Platón regresó de nuevo para intentar una vez más desarrollar su estado ideal y llevarlo a la práctica, pero aunque fue recibido con cordialidad una vez más tuvo que terminar marchándose sin conseguirlo y regresó a Atenas y a su Academia ,muriendo en 347 a.C con más de ochenta años de edad y sin haber transformado en realidad el estado ideal que describió en su obra "Politeia", un título que significaba en griego "gobierno de la polis" y que luego los romanos traducirían como "Res Publica", "la cosa pública" o "la esfera pública" y que en castellano transformamos en la "República". Es esta la obra que nos interesa ahora porque en ella Platón expone su Estado ideal, aquel que trató de desarrollar sin éxito bajo los gobiernos de Dionisio el Viejo y Dionisio el Joven de Siracusa. Como en otras de sus obras, ésta se desarrolla en la forma de un diálogo que su maestro Sócrates sostiene con otros intelectuales que disputan sobre la definición y características de un estado. Platón habla por boca de Sócrates y comienza por explicarnos la razón por la que nace un estado "Un Estado nace porque cada uno de nosotros no se basta a sí mismo. El hombre tiene tantas necesidades que varios hombres se ven obligados a vivir juntos para ayudarse recíprocamente. A esta convivencia le daremos el nombre de Estados", y en esta convivencia cada persona se dedicará a una determinada función que sea útil para los demás y cubra sus necesidades "En nuestro Estado habrá necesidad de un agricultor, de un albañil, de un tejedor. Cada uno se especializará en el propio trabajo , produciendo para sí y para los otros" Es decir, el Estado nace por la necesidad de colaborar unos con otros para cubrir las necesidades esenciales como el alimento, el vestido y la vivienda . Es una sociedad sencilla e idílica, donde, según Rafael Herrera "los hombres viven en paz, en armonía entre sí y con la naturaleza"
Pero Glaucón, que está escuchando las palabras de Sócrates (Platón), interviene criticando esa sociedad que sólo se dedica a cubrir las necesidades básicas , pero el ser humano precisa algo más que limitarse a satisfacer esas necesidades básicas para ser feliz y compara ese estado de Platón con una ciudad de cerdos "Si estuvieras organizando una ciudad de cerdos ¡no los hubieras nutrido de modo distinto!" pero el hombre no es un cerdo y tiene otras necesidades "Es necesario que, si no queremos que lleven una vida miserable , coman recostados en lechos y puedan tomar de una mesa viandas y postres" . Ese Estado de Cerdos al que se refiere Glaucón es un estado sin ambiciones , que no busca progresar, ni persigue el conocimiento, que se conforma con cubrir sus necesidades básicas , pero Platón en boca de Sócrates responde que ese deseo de tener más, de progresar, conduce a las guerras al enfrentamiento permanente "¿Habremos , pues , de recortar en nuestro provecho el territorio vecino , si queremos tener suficientes pastos y tierra cultivable llevados por un deseo de ilimitada adquisición de riqueza?" Entonces Platón reconoce que para construir su Estado ideal es necesario tener en cuenta que el ser humano tiene más necesidades al margen de las más esenciales, que anhela conocimientos y alimenta ambiciones y llega a la conclusión de que "no tendría sentido elaborar un sistema político ideal habitado por seres humanos irreales", un obstáculo en el que suelen caer las utopías que se crean alrededor de un hombre idealizado olvidando su naturaleza humana. , sus pasiones, sus sentimientos. De esta forma Platón admite la necesidad de pasar de aquel Estado Natural donde bastaba con cubrir las necesidades esenciales y donde sus habitantes vivían en una especie de anarquía armónica sin necesidad de un poder público que los gobernase , hacia otro Estado de Lujo, que requiere otro tipo de organización más compleja y Platón divide este Estado en tres grupos .
Por un lado tenemos los artesanos y los agricultores , que se dedican a las actividades manuales, el cultivo de la tierra y la artesanía y que no requieren más que una educación básica. Así eran antes todos los habitantes del Estado Natural, pero ahora son necesarias otras clases que se encarguen de conservar el orden de la sociedad , y aquí nos encontramos con los guardianes que según dice Sócrates en el diálogo "deberán ser mansos con sus compañeros y duros con los enemigos " y requerirán una formación más profunda que los agricultores y artesanos porque su espíritu no se centra sólo en lo material sino que también aspira a conocimientos más profundos. Y de estos guardianes, a los que podríamos considerar los soldados protectores del Estado, surgen también la última de las clases del estado ideal platónico, los magistrados o filósofos , que , según explica Rafael Herrera "no se dejan llevar por los apetitos materiales y los placeres sensuales, tienen al conocimiento de la realidad más profunda" y por ello "son los idóneos para establecer justicia". Sobre todos ellos aún habría otra persona, el filósofo-rey , un puesto que correspondería al ciudadano que hubiera alcanzado un conocimiento más profundo de la realidad y que, por lo tanto, conoce la justicia y el bien . Pero esta distribución entre agricultores- artesanos, guardianes y magistrados no se hace de forma aleatoria ni tampoco por derecho de nacimiento, no son clases sociales inamovibles, sino que se podrá pertenecer a una u otra en función de sus cualidades intelectuales detectadas y puestas al descubierto durante el proceso de educación.
El sistema educativo del estado ideal de Platón comienza con el cultivo del cuerpo y la música. A continuación la educación avanza hacia la enseñanza de las matemáticas y la geometría que enseñara a los ciudadanos que hay otra realidad superior a la de las cosas materiales, la realidad del mundo de las ideas, un mundo abstracto que muchos ciudadanos no tendrán capacidad para entender. Estos serán los que en ese momento dejen la enseñanza para ocupar su puesto en la clase de los agricultores-artesanos, que ya vimos que sólo necesitaban una enseñanza básica. Los que completen sus estudios de matemáticas y geometría pasan a engrosar las filas de los guardianes mientras que los que prosigan sus estudios y se adentren en la filosofía , serán los futuros magistrados, los más alejados del mundo de la materia y los más próximos al mundo de las ideas y así llegaríamos al Filósofo-Rey que sería aquel que atesorara el máximo conocimiento. Es importante subrayar que la educación es igual para todos, uno no pertenece a una u otra clase social por nacimiento, sino que será el sistema educativo, el rendimiento intelectual del ciudadano, el que determinará a que estamento social pertenece. Y ahora que sabemos como está dividida la sociedad del estado ideal de Platón conozcamos su funcionamiento , las normas que la rigen y que han hecho que sea llamada "Comunismo Platónico". La idea básica es, según Rafael Herrera. que "los ciudadanos consideren superior el bien de la comunidad al bien propio" incluyendo aquí a la familia, porque para Platón la única familia es el propio Estado, aunque reconocer que para la clase de agricultores-artesanos, los de menor capacidad intelectual y más apegados al mundo material, la familia es necesaria y no puede ser suprimida, pero si es necesario eliminarla entre la clase de los guardianes y los magistrados.
Escribe Platón que los guardianes y magistrados tienen que estar dispuestos a renunciar a todo por el bien de la comunidad, del Estados "Ninguno de los guardianes , sea filósofo o soldado, deberá tener jamás bienes personales", además deben renunciar a formar una familia y el amor entre ellos será libre y comunitario y no existirán las figuras de padres e hijos porque nadie sabrá de quién es cada nuevo niño "Esas mujeres serán todas comunes para todos los hombres y ninguna cohabitará privadamente con ninguno de ellos; y los hijos serán asimismo comunes y ni el padre conocerá a su hijo ni el hijo a su padre". Cuando uno de los interlocutores de Sócrates le pregunta si es posible que una persona que acepta tales renuncias puede llegar a ser feliz, Sócrates responde (aunque ya sabemos que es Platón el que lo hace) "La finalidad que nos hemos fijado de antemano no es la de hacer feliz a una clase o a un individuo, sino a todo el Estado en su conjunto. Ten en cuenta que la gran riqueza y la extrema pobreza hacen infeliz al hombre , por cuanto una produce lujo, pereza y movimientos revolucionarios, y la otra mezquindad, trabajo mal realizado y movimientos revolucionarios" Entre la clases de los guardianes y los magistrados no hay bienes privados, todo es de todos, pero no así entre la clase inferior de agricultores-artesanos. a los que Platón no considera preparados para ese tipo de vida sin familia y sin propiedad privada. Lo cierto es que esta sociedad ideal imaginada por Platón tiene mucho de inhumano e inspirará muchos siglos después otras sociedades utópicas que degenerarán en prácticas tan terribles como la eugenesia , que encuentran su apoyo en pasajes como este en el que el filósofo griego pone la maternidad al servicio del Estado, seleccionando a los hijos de los mejores y eliminando a los más débiles
" Tomarán, creo yo , a los hijos de los mejores y los llevarán a la inclusa, poniéndolos al cuidad de unas ayas que vivirán aparte , en cierto barrio de la ciudad; en cuanto a los de los seres inferiores, e igualmente si alguno de los otros nace lisiado, los esconderán , como es debido, en un lugar secreto y oculto". En el siglo XX el gobierno nazi de Adolf Hitler (1889-1945) trató de hacer algo muy parecido con un programa llamado Lebensborn , una forma de reproducción selectiva para promover el crecimiento de una población con los rasgos de lo que ellos consideraban la raza superior aria , personas de pelo y ojos claros, piel blanca y de elevada estatura , mientras que el programa Aktion 4 se dedicaba a eliminar enfermos mentales, niños con taras físicas o mentales o todo aquel que fuera calificado como una persona improductiva. Como os decía al inicio, las utopías de sociedades perfectas tienen tendencia a generar monstruos como Hitler en Alemania, Josef Stalin(1878-1953) en la Unión Soviética o Mao Tse Tung(1893-1976) en China . Por supuesto, no estoy comparando las palabras de Platón con los hechos realizados por estos genocidas del siglo XX,nada más lejos del pensamiento del filósofo griego que la actitud de esos hombres, pero cuando se deshumaniza una sociedad como sucede con el Estado ideal platónico, pueden surgir desviaciones de esta naturaleza, donde el ser humano termina completamente absorbido por el estado y desaparece como individuo. En la sociedad de Platón el Estado llega a intervenir en la vida de los individuos hasta el punto de , como explica Rafael Herrera en su libro, "arrebatar los hijos a las madres para impedir cualquier posibilidad de apego con el objetivo de que la comunidad entera considere a cualquier pequeño como su propio hijo", es decir, se trata de hijos comunales. Aunque hay un elemento positivo en esta sociedad platónica y es que hombres y mujeres, contraviniendo todas las ideas de la época, reciben la misma consideración y trato.
De esta forma, afirma Platón en la "República" que "no existe en el regimiento de la ciudad ninguna ocupación que sea propia de la mujer, como tal mujer, ni del varón, como tal varón, sino que las dotes naturales están diseminadas indistintamente en unos y otros seres, de modo que la mujer tiene acceso por su naturaleza a todas las labores y el hombre también a todas" ¿Qué os ha parecido el estado ideal de Platón? Creo que no lo habréis hallado demasiado atractivo , el Estado interviene hasta en los aspectos más personales del individuo que desaparece diluido en el Estado. Sin familia y sin propiedad privada los guardianes y los magistrados viven exclusivamente al servicio del Estado, no hay lugar para el desarrollo personal y en ese sentido la utopía de Platón tiene algo de inhumano, de despersonalizado que convierte su utopía en un estado totalitario donde no hay espacio para la libertad individual. Para terminar con este viaje por la utopía de Platón, comparemos este fragmento de su diálogo en la "República" que ya hemos visto antes "La finalidad que nos hemos fijado de antemano no es la de hacer feliz a una clase o a un individuo, sino a todo el Estado en su conjunto." con estas otras palabras contenidas en el Preámbulo de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos del 4 julio de 1776 "Sostenemos como evidentes por sí mismas dichas verdades: que todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables, que entre estos están la vía , la libertad y la búsqueda de la felicidad ; que para garantizar estos derechos se instituyen entre los hombres los gobiernos, que derivan sus poderes legítimos del consentimiento de los gobernados" Una sociedad que implica la renuncia a la felicidad individual, o al menos a su posibilidad, creo que está llamado al fracaso.
Pero no fue Platón el único utopista del la Grecia Clásica. En la obra de Rafael Herrera , "Historia de la utopía" encuentro a otro pensador griego que describió su propia sociedad utópica. Es considerado padre del género utópico, Evémero de Messina, del que poco se sabe de su vida, ni siquiera su fecha de nacimiento y muerte que se estima que podría ser entre el 330 y el 250 a.c ni tampoco su lugar de nacimiento aunque se cree que tal vez fuera Messina, de ahí su nombre, y en cuanto a su obra apenas se conservan algunos fragmentos de su obra "Inscripción sagrada" donde abriendo una tradición que será seguida muchos siglos después por los utopistas de los siglos XVI y XVII, nos relata un viaje que le lleva hasta una isla en el Océano Índico a la que llama Panquea en la que se desarrolla una ciudad que, como el estado platónico, esta dividido en tres castas "la primera allí es la de los sacerdotes, ; la segunda casta es la de los agricultores ; y la tercera la de los guerreros . Los sacerdotes están al frente de todo, emiten sus juicios en los pleitos y tienen la autoridad en los demás asuntos públicos. Los agricultores que se dedican a trabajar la tierra , ponen sus productos en un depósito común. De igual modo los pastores entregan a la comunidad los animales para los sacrificios y para el resto de los ciudadanos." Al igual que sucedía en el estado de Platón "no está permitido tener algo en propiedad a excepción de una casa y un jardín" Para Evémero esta sociedad no había sido fundada por los dioses sino por hombres ejemplares y sabios que luego el tiempo hizo que terminaran siendo deificados. Es una nueva sociedad cooperativista , donde no existe la propiedad privada y todo se comparte.
Ahora avanzaremos en el tiempo hasta el siglo I y II d. C. Surgen las primeras comunidades de una religión nueva, se hacen llamar cristianos, los seguidores de Cristo que también creerán en una utopía , la salvación de la humanidad y su viaje a un reino celestial, porque el Estado ideal de estas primeras comunidades cristianas no está en la tierra sino en el cielo basándose en las palabras recogidas en el Evangelio de San Juan cuando Jesús responde a la pregunta del gobernador romano Poncio Pilato "¿Eres tu el rey de los judíos?" (San Juan 18,33) con estas palabras "Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo , mis súbditos lucharían para que yo no fuera entregado a los judíos, Pero mi reino no es de aquí"(San Juan 18, 36-37) Y a ese reino celestial es al que aspiraban ir los cristianos sin importarles a que gobierno pertenecían en este mundo. Pero estas primeras comunidades cristianas tienen ciertos puntos en común con la sociedad utópica de Platón ya que en ellas se comparte todo, los bienes son comunes y no hay propiedad privada "Todos los que habían creído estaban juntos , y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón"(Hechos de los Apóstoles 2,44-47) Cuando con el paso del tiempo el número de cristianos sea cada vez mayor la organización de las comunidades cristianas será cada vez más compleja e irá perdiendo este carácter comunal e igualitario pasando a ser recordado como el tiempo de un cristianismo puro al que muchos aspiraran a regresar. Una vez más el deseo de recuperar un paraíso perdido.
Siguiendo esta utopía celestial de los cristianos, de la esperanza en un reino perfecto fuera de la tierra, su máximo representante sería San Agustin de Hipona(354-430) y su obra "La Ciudad de Dios" donde establece una clara diferencia entre el mundo terrenal en el que vivimos, y el mundo celestial, el mundo perfecto al que aspira a llegar el cristiano, su utopía. Poco se podía hacer para cambiar el mundo terrenal al que consideraba fundado por el mal , estableciendo un antagonismo entre la Ciudad del Hombre, construidos sobre la culpa porque no olvidemos lo que veíamos al principio de este relato , como Caín , el asesino de Abel, era el fundador de la primera ciudad, y en ese sentido todas las ciudades y todos los estados son satánicos en el sentido de que están gobernados por la fuerza y se enfrentan con la Ciudad de Dios, la ciudad perfecta que está llamada a derrotar a la Ciudad de los Hombres al final de la historia. Y a lo largo de ese conflicto se producirán destrucciones globales, como el Diluvio de Noé, para exterminar la corrupción y fundar un nuevo mundo, un proceso que se repetirán en sucesivas ocasiones hasta el triunfo final de la Iglesia de Dios que acogerá en su seno a los elegidos, los buenos y los justos. De nuevo encontramos aquí los elementos característicos de las utopías, el anhelo de un lugar perfecto, la Ciudad de Dios y a continuación la necesidad de destruir las sociedades corruptas para construir sobre sus ruinas un nuevo orden dirigido por unos pocos elegidos, como había sucedido con Noé y su familia en el Diluvio. Un esquema que , como veremos mañana, vamos a encontrar en las utopías del siglo XVI, XVII y XVIII hasta la llegada de la Revolución Industrial , el estallido de la Revolución Francesa y el siglo XIX que traerá consigo nuevas utopías que nos llevarán hasta el comunismo.
Enlace con la segunda parte de Historias de utopía: en búsqueda del mundo perfecto
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Enlace con la tercera parte de Historias de utopía: en búsqueda del mundo perfecto
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Siguiendo el texto de la obra de Rafael Herrera Guillén os propongo un viaje por la historia y las ideas para rastrear las diferentes utopías surgidas a lo largo de los siglos, desde la utopía primigenia del Paraíso Terrenal que nos describe la Biblia, a la República utópica del filósofo griego Platón (427-347 a.C), la Jerusalén celeste de la "Ciudad de Dios" de Agustín de Hipona (354-430), la isla de Utopía imaginada por el creador del término , Tomás Moro, que mostraría el camino que siguieron otros utópicos como el filósofo, científico y político inglés Francis Bacon (1561-1526), que llamó a su utopía La Nueva Atlántida, la Ciudad del Sol de filósofo y poeta italiano Tommaso Campanella (1568-1639) que pagaría con la privación de la libertad su pensamiento utópico, la utopía protestante de Cristianópolis surgida de la mente de Johann Valentin Andreae (1586-1654), el primer intento verdadero de llevar la utopía a la realidad en las reducciones jesuitas de Paraguay llamadas también la República Guaraní, las teorías utópicas del filósofo francés Jean Jacques Rousseau (1712-1778) y su defensa del retorno al estado natural del hombre cuando era libre expresada en su obra "El Contrato Social" cuando escribía que "El hombre nace libre, pero en todos lados está encadenado" y las ideas socialistas utópicas surgidas después de la Revolución Francesa de 1789, como el pensamiento del alemán Johann Gottlieb Fichte (1762-1814) y su idea del socialismo de estado donde anunciaba muchos males de las sociedades surgidas de la Revolución Industrial que el tiempo confirmaría, las sociedades justas y el nuevo hombre industrial sobre las que reflexionaba el aristócrata francés conde de Saint- Simon (1760-1825), las sociedades cooperativistas ideadas por el galés Robert Owen (1771-1858) y los falansterios de otro socialista utópico, el francés Charles Fourier (1772-1837) , que prepararían el camino a nuevas utopías como el socialismo científico de Karl Marx (1818-1883), aunque detendré este relato en Fourier, pues el marxismo requerirá en su momento un artículo dedicado en exclusiva a él.
"Adán y Eva" del pintor renacentista italiano Rafael Sanzio (1483-1520) realizado entre 1508 y 1511 para la Estancia de la Signatura en el Palacio Apostólico del Vaticano, donde nos presenta la escena de la tentación de la serpiente que invita a Eva a comer del fruto del árbol de la Ciencia del , aquel que otorga el conocimiento del bien y del mal . La única condición que había puesto Yavé para la permanencia del ser humano en el Jardín de Edén era conservar un estado de ingenuidad natural, ignorando el significado del mal y viviendo así una existencia perfecta donde no existía la muerte, el trabajo ni el sufrimiento. Pero cuando Adán y Eva prueban del fruto del árbol están actuando de acuerdo a la naturaleza del ser humano, la curiosidad, la búsqueda de conocimiento, de respuestas, tal vez porque ese utópico e idílico Edén no satisface la necesidad de saber inherente al espíritu del hombre. Todas las utopías han tratado de recuperar ese estado de perfección , ya sea desde la religión o desde la filosofía y el pensamiento político sin lograrlo, tal vez porque la utopía es buena para impulsarnos a mejorar pero no para instalarnos en ella , porque eso supondría haber llegado a algún lugar y no poder evolucionar más y tanto nosotros como todo lo que nos rodea está siempre en continuo cambio y evolución (Imagen procedente de http://doc.jurispro.net ) |
Así que , como podéis ver, tenemos un largo camino por delante y lo mejor será que nos pongamos en marcha y nos subamos a nuestra máquina del tiempo para irnos muy lejos en el pasado, a una época en la que todavía no contábamos el tiempo, un lugar utópico al que llamamos Paraíso Terrenal, que, como escribe Rafael Herrera , es " el mundo más perfecto con el que puede soñar un hombre". El Génesis nos cuenta que Yavé, después de crear a Adán, "Plantó después Yavé Dios un jardín en Eden, al oriente, y en él puso al hombre que había formado" (Génesis 2, 8-9) y a continuación "Tomó, pues, Yavé Dios al hombre y le puso en el jardín de Edén para que lo cultivase y guardase . Y dio al hombre este mandato "Puedes comer de todos los árboles del jardín; más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás en modo alguno, porque el día en que comieres ciertamente morirás"(Génesis 2, 15-18) A continuación Yavé creó a Eva y "Estaban los dos desnudos, el hombre y su mujer, sin avergonzarse uno de otro" porque ninguno de los dos conocía el mal y por ello no podían sentir vergüenza, ni culpa , es el hombre natural , que no ha sido corrompido y al que aspirarán a recuperar los movimientos utópicos. Pero Adán y Eva transgreden la única prohibición de Yavé y prueban, incitados por la astuta serpiente, el fruto del árbol de la ciencia del Bien y del Mal y "Entonces se abrieron sus ojos y conocieron que estaban desnudos; cosieron unas hojas de higuera y se hicieron cinturones" (Génesis 3,7-8) La búsqueda del conocimiento, una constante del ser humano, le hizo perder aquella ingenuidad primigenia , conocieron lo que era el bien y el mal , y vuelvo a las palabras de Rafael Herrera que nos explica que "el ser humano ganó la inteligencia y la libertad pero a costa de perder la felicidad, la inocencia y la eternidad". Adán y Eva son expulsados del Paraíso, condenados a trabajar y a morir "Con trabajo sacarás de ella tu alimento todo el tiempo de tu vida. Ella te dará espinas y cardos y comerás la hierba de los campos . Con el sudor de tu frente comerás el pan, hasta que vuelvas a la tierra , pues de ella fuiste tomado, ya que polvo eres y en polvo te has de convertir"(Génesis 3, 17-20). Se prohibió al ser humano comer del fruto del Árbol de la Vida que le habría conferido la inmortalidad.
Este Paraíso perdido y el deseo de recuperar esa edad dorada de la humanidad será una constante de las utopías que iremos encontrando a lo largo de la historia. Pero los males de la humanidad no habían hecho más que comenzar pues después de la expulsión del Jardín de Edén el mal entrará en la humanidad cuando uno de los hijos de Adán y Eva, Caín, asesine a su hermano Abel. Yavé condena a Caín "Andarás errante y vagabundo sobre la tierra "(Génesis 4 12-13) y Caín se aleja y funda la primera ciudad "Más tarde se puso a construir una ciudad, a la que dio el nombre de su hijo Enoc" (Génesis 4, 17-18), una ciudad fundada por un fratricida, como si se tratara de un símbolo de que todo estado se construye a partir del derramamiento de sangre, como escribía san Agustín en su "Ciudad de Dios" "La primera ciudad, el primer Estado, están fundados por un parricida. Un fratricidio ha manchado también los orígenes de Roma (hace referencia san Agustín al asesinato de Remo por Rómulo, fundador y primer rey de Roma) tan manchados que puede decirse que es una ley que ha de correr antes sangre , allí donde ha de alzarse un Estado" El tiempo pasa y llegamos a otra de las ideas que encontraremos en casi todas las utopías, la corrupción generalizada de la sociedad y su destrucción como único medio para construir una nueva sociedad justa y pura formada por unos pocos elegidos para ser salvados. Volvamos al texto bíblico "Viendo Yavé que la maldad de los hombres sobre la tierra era muy grande y que todos los pensamientos de su corazón tendían continuamente al mal, se arrepintió de haber creado al hombre sobre sobre la tierra y se afligió tanto en su corazón que dijo "Exterminaré de sobre la faz de la tierra al hombre que he formado"(Génesis 6, 5-8) y ya sabemos lo que sucedió luego, Yavé escogió a Noé y su familia por ser los únicos puros de corazón y los salvó ordenando que construyeran un arca donde refugiarse junto con una pareja de cada animal en la tierra , para salvarse del Diluvio que destruiría toda forma de vida.
"El Diluvio" de 1509 , una de las escenas de la Biblia con las que Miguel Ángel Buonarotti (1475-1564) decoró el techo de la Capilla Sixtina. Las revoluciones aspiran a subvertir el orden imperante, destruirlo y fundar sobre sus ruinas un nuevo orden social para los considerados justos. El Diluvio es la destrucción de un mundo corrupto del que sólo se salva Noé y su familia, los justos , que fundarán un nuevo orden que tratará de recuperar el mundo perdido del Jardín de Edén. Esa es la esencia de toda utopía , la regeneración de un mundo corrupto para instaurar un nuevo orden que nos permita construir esa sociedad ideal .Cuando la corrupción vuelve a hacer acto de presencia el proceso se repite (Imagen procedente de http://es.wikipedia.org ) |
El Diluvio acabó con la vida de todos excepto con los que iban a bordo del Arca. La sociedad corrupta fue destruida y un nuevo orden nacía con Noé y sus descendientes. Rafael Herrera sintetiza así lo que estará en el origen de todas las utopías, la destrucción del orden social corrompido y la recuperación del Paraíso perdido, el regreso al Jardín de Edén "La historia de la utopía se puede sintetizar - escribe Rafael Herrera - en la permanente promesa de la recuperación en el futuro de un paraíso perdido(el Jardín de Edén) en el pasado mediante la destrucción del mundo presente(el Diluvio)" Y ahora abandonaremos el mundo bíblico para avanzar en el tiempo hasta la Grecia del siglo V a. C donde nacía el hombre que nos iba a dejar la primera obra sobre la construcción de un estado ideal . Hacia el 427 a. C nacía en Atenas Platón(hacia 27-347 a.C) en el seno de una familia de la aristocracia ateniense cuyos orígenes se remontaban nada menos que al último rey de Atenas, Codro (hacia 1089-1068), y también estaba emparentado con uno de los grandes políticos y legisladores de la historia de la ciudad, Sólon de Atenas (hacia 638 - 558 a.C). Como escribe Luciano di Crescenzo(1928) en su "Historia de la filosofía griega" con esos antecedentes era inevitable que Platón sintiera inclinación por la política como él mismo reconocía "Cuando era joven , tuve una experiencia similar a la de muchos otros muchachos de mi edad: pensaba dedicarme a la política apenas estuviera en situación de bastarme a mí mismo", pero la convulsa época que le tocó vivir, con la crisis de la democracia ateniense, la Guerra del Peloponeso entre el 431 y 404 a.C que enfrentó a Atenas con Esparta con la victoria final de esta última y en la que participó como soldado Platón, y la implantación de un régimen oligárquico que sustituía a la democracia llamado el gobierno de los Treinta Tiranos, apartaron a Platón de la política y le inclinaron por la filosofía.
Su vida cambió un poco antes de la derrota de Atenas, cuando hacia el 407 a.C Platón conoce a quien iba a ser su maestro y principal influencia, Sócrates (470-399 a.C). Escribe di Crescenzo que, citando a las "Vidas, opiniones y sentencias de los filósofos más ilustres" de Diógenes Laercio (siglo III d.C), que Platón "a los veinte años se ocupaba sólo de poesía y que un día, mientras se dirigía al teatro para participar en una competición poética , vio a Sócrates que hablaba a un grupo de jóvenes. Entendió de inmediato que aquel anciano iba a ser su nuevo guía espiritual: arrojó al fuego las poesías y empezó a seguirlo" En 399 a.C Sócrates fue condenado a muerte acusado de impiedad y de corromper la moral de la juventud ateniense, aunque en realidad era acusado de difundir lo que eran consideradas ideas peligrosas entre los jóvenes atenienses que no eran otras que enseñarles a preguntar por las cosas y a reflexionar. El pensamiento libre siempre ha sido visto con malos ojos por el poder. Tras la muerte de Sócrates Platón abandonó Atenas y viajó por Egipto para aprender de los sacerdotes egipcios, visitó a los discípulos de Pitágoras (569 a.C- 475 a.C) en Italia y en 388 a.C se estableció en la isla de Sicilia, en la colonia griega de Siracusa donde gobernaba el tirano Dionisio el Viejo (haica 430-367 a.C) donde Platón trató de influir para crear allí el estado ideal que ya había nacido en la mente de Platón y que veremos a continuación. Pero a Dionisio el Viejo no le hizo mucha gracia las ideas del filósofo griego y lo expulsó llegando incluso a querer venderlo como esclavo. Finalmente Platón logró regresar a Atenas donde en el año 387 a.C fundaba un lugar donde sus discípulos podrían reunirse a estudiar y recibir lecciones de su maestro. Éste lugar se hallaba en una arboleda situada al noroeste de Atenas, conocida como los bosquecillos de Academo en honor del héroe mitológico del mismo nombre. Así nacía la Academia de Platón, uno de los acontecimientos culturales más importantes del mundo antiguo.
Platón(de rojo) sosteniendo en sus manos una de sus obras, el "Timeo", hablando con el más conocido de sus discípulos, Aristóteles (384-322 a.C) que lleva en las manos su obra "Ética", en un fragmento de la célebre "Escuela de Atenas" realizada entre 1510-1511 por Rafael Sanzio(1483-1520). Platón es considerado por muchos como el filósofo más importante de la historia, si bien esto es algo siempre muy subjetivo, pero sin duda su obra es uno de los cimientos del pensamiento occidental y una de sus aportaciones que más influencia tendría en el futuro serían la creación de un Estado Ideal que Platón consideraba que sería aquel en el que se instaurase la justicia de forma perfecta. Por eso el debate sobre el estado ideal contenido en su obra "República" se abre con un debate sobre la justicia y mientras que unos consideran que justicia es "dar a cada uno lo que se le debe" otros sostienen que "lo justo no es otra cosa que lo que conviene al más fuerte", que en realidad se aproxima bastante a lo que ha sucedido a lo largo de la historia. Sin embargo, para Sócrates (que es el papel que Platón adopta en el diálogo) la justicia y la política tienen que ir unidos y así si el objeto de la política es el bien de los ciudadanos eso significa que el gobernante tendrá que hacer justicia a los gobernados y si el gobernante adoptara una decisión injusta esto terminará generando la rebelión de los gobernados . Partiendo de este punto Platón expondrá su idea del Estado Ideal que os trato de describir un poco más adelante (/Imagen procedente de http://mochuelo20.wordpress.com ) |
Pero Glaucón, que está escuchando las palabras de Sócrates (Platón), interviene criticando esa sociedad que sólo se dedica a cubrir las necesidades básicas , pero el ser humano precisa algo más que limitarse a satisfacer esas necesidades básicas para ser feliz y compara ese estado de Platón con una ciudad de cerdos "Si estuvieras organizando una ciudad de cerdos ¡no los hubieras nutrido de modo distinto!" pero el hombre no es un cerdo y tiene otras necesidades "Es necesario que, si no queremos que lleven una vida miserable , coman recostados en lechos y puedan tomar de una mesa viandas y postres" . Ese Estado de Cerdos al que se refiere Glaucón es un estado sin ambiciones , que no busca progresar, ni persigue el conocimiento, que se conforma con cubrir sus necesidades básicas , pero Platón en boca de Sócrates responde que ese deseo de tener más, de progresar, conduce a las guerras al enfrentamiento permanente "¿Habremos , pues , de recortar en nuestro provecho el territorio vecino , si queremos tener suficientes pastos y tierra cultivable llevados por un deseo de ilimitada adquisición de riqueza?" Entonces Platón reconoce que para construir su Estado ideal es necesario tener en cuenta que el ser humano tiene más necesidades al margen de las más esenciales, que anhela conocimientos y alimenta ambiciones y llega a la conclusión de que "no tendría sentido elaborar un sistema político ideal habitado por seres humanos irreales", un obstáculo en el que suelen caer las utopías que se crean alrededor de un hombre idealizado olvidando su naturaleza humana. , sus pasiones, sus sentimientos. De esta forma Platón admite la necesidad de pasar de aquel Estado Natural donde bastaba con cubrir las necesidades esenciales y donde sus habitantes vivían en una especie de anarquía armónica sin necesidad de un poder público que los gobernase , hacia otro Estado de Lujo, que requiere otro tipo de organización más compleja y Platón divide este Estado en tres grupos .
El filósofo nacido en Austria y nacionalizado británico Karl Raymund Popper(1902-1994) publicaba en 1945 "La sociedad abierta y sus enemigos" en la que realizaba una dura crítica al estado ideal defendido por Platón en la "República", acusándole de ser el inspirador de los totalitarismos, en particular los que proliferaron durante el siglo XX y que Popper vivió muy de cerca, en particular el nazismo ya que Popper era judío. Sobre todo critica las definiciones de democracia que realiza Platón como esta "La democracia nace cuando los pobres, después de haber alcanzado la victoria, matan a algunos adversarios, condenan al exilio a otros, y se reparten con los restantes el gobierno y los cargos públicos" Pero creo que tampoco es del todo justo juzgar a un hombre que escribió en el siglo IV a. C y condicionado por la cultura en la que nació, extrapolando su pensamiento al siglo XX y al uso que pudieron darle personas que vivieron dos milenios después que el filósofo griego . En todo caso, inspiradora o no de los regímenes totalitarios, la verdad es que el Estado Ideal de Platón es una utopía muy poco apetecible, donde el hombre carece de libertad y el estado controla incluso la reproducción y las relaciones sexuales , casi como el Gran Hermano de George Orwell (1903-1950) (Imagen procedente de http://www.denstoredanske.dk ) |
Por un lado tenemos los artesanos y los agricultores , que se dedican a las actividades manuales, el cultivo de la tierra y la artesanía y que no requieren más que una educación básica. Así eran antes todos los habitantes del Estado Natural, pero ahora son necesarias otras clases que se encarguen de conservar el orden de la sociedad , y aquí nos encontramos con los guardianes que según dice Sócrates en el diálogo "deberán ser mansos con sus compañeros y duros con los enemigos " y requerirán una formación más profunda que los agricultores y artesanos porque su espíritu no se centra sólo en lo material sino que también aspira a conocimientos más profundos. Y de estos guardianes, a los que podríamos considerar los soldados protectores del Estado, surgen también la última de las clases del estado ideal platónico, los magistrados o filósofos , que , según explica Rafael Herrera "no se dejan llevar por los apetitos materiales y los placeres sensuales, tienen al conocimiento de la realidad más profunda" y por ello "son los idóneos para establecer justicia". Sobre todos ellos aún habría otra persona, el filósofo-rey , un puesto que correspondería al ciudadano que hubiera alcanzado un conocimiento más profundo de la realidad y que, por lo tanto, conoce la justicia y el bien . Pero esta distribución entre agricultores- artesanos, guardianes y magistrados no se hace de forma aleatoria ni tampoco por derecho de nacimiento, no son clases sociales inamovibles, sino que se podrá pertenecer a una u otra en función de sus cualidades intelectuales detectadas y puestas al descubierto durante el proceso de educación.
El sistema educativo del estado ideal de Platón comienza con el cultivo del cuerpo y la música. A continuación la educación avanza hacia la enseñanza de las matemáticas y la geometría que enseñara a los ciudadanos que hay otra realidad superior a la de las cosas materiales, la realidad del mundo de las ideas, un mundo abstracto que muchos ciudadanos no tendrán capacidad para entender. Estos serán los que en ese momento dejen la enseñanza para ocupar su puesto en la clase de los agricultores-artesanos, que ya vimos que sólo necesitaban una enseñanza básica. Los que completen sus estudios de matemáticas y geometría pasan a engrosar las filas de los guardianes mientras que los que prosigan sus estudios y se adentren en la filosofía , serán los futuros magistrados, los más alejados del mundo de la materia y los más próximos al mundo de las ideas y así llegaríamos al Filósofo-Rey que sería aquel que atesorara el máximo conocimiento. Es importante subrayar que la educación es igual para todos, uno no pertenece a una u otra clase social por nacimiento, sino que será el sistema educativo, el rendimiento intelectual del ciudadano, el que determinará a que estamento social pertenece. Y ahora que sabemos como está dividida la sociedad del estado ideal de Platón conozcamos su funcionamiento , las normas que la rigen y que han hecho que sea llamada "Comunismo Platónico". La idea básica es, según Rafael Herrera. que "los ciudadanos consideren superior el bien de la comunidad al bien propio" incluyendo aquí a la familia, porque para Platón la única familia es el propio Estado, aunque reconocer que para la clase de agricultores-artesanos, los de menor capacidad intelectual y más apegados al mundo material, la familia es necesaria y no puede ser suprimida, pero si es necesario eliminarla entre la clase de los guardianes y los magistrados.
Fotografía de una clínica del programa Lebensborn. Se animó a los miembros de las SS a que tuvieran tantos hijos como pudieran, con independencia de que estuvieran o no casados, niños todos ellos respondiendo al ideal de la raza aria rubios, altos, guapos y de ojos azules. Los miembros de las SS se convertían en sementales que inseminaban a madres genéticamente de pura raza aria, niños destinados a convertirse en "Gottenmensche", niños dioses. A lo largo del programa Lebensborn se cree que nacieron no menos de once mil niños que eran propiedad del estado y se entregaban en adopción a familias alemanas.Esta propiedad del estado de los niños y la forma en que eran concebidos recuerda en parte a la idea de niños comunitarios del Estado Ideal de Platón , salvando las distancias del tiempo y del componente racial al que Platón , por supuesto, nunca se refirió (Imagen procedente de http://es.wikipedia.org ) |
Escribe Platón que los guardianes y magistrados tienen que estar dispuestos a renunciar a todo por el bien de la comunidad, del Estados "Ninguno de los guardianes , sea filósofo o soldado, deberá tener jamás bienes personales", además deben renunciar a formar una familia y el amor entre ellos será libre y comunitario y no existirán las figuras de padres e hijos porque nadie sabrá de quién es cada nuevo niño "Esas mujeres serán todas comunes para todos los hombres y ninguna cohabitará privadamente con ninguno de ellos; y los hijos serán asimismo comunes y ni el padre conocerá a su hijo ni el hijo a su padre". Cuando uno de los interlocutores de Sócrates le pregunta si es posible que una persona que acepta tales renuncias puede llegar a ser feliz, Sócrates responde (aunque ya sabemos que es Platón el que lo hace) "La finalidad que nos hemos fijado de antemano no es la de hacer feliz a una clase o a un individuo, sino a todo el Estado en su conjunto. Ten en cuenta que la gran riqueza y la extrema pobreza hacen infeliz al hombre , por cuanto una produce lujo, pereza y movimientos revolucionarios, y la otra mezquindad, trabajo mal realizado y movimientos revolucionarios" Entre la clases de los guardianes y los magistrados no hay bienes privados, todo es de todos, pero no así entre la clase inferior de agricultores-artesanos. a los que Platón no considera preparados para ese tipo de vida sin familia y sin propiedad privada. Lo cierto es que esta sociedad ideal imaginada por Platón tiene mucho de inhumano e inspirará muchos siglos después otras sociedades utópicas que degenerarán en prácticas tan terribles como la eugenesia , que encuentran su apoyo en pasajes como este en el que el filósofo griego pone la maternidad al servicio del Estado, seleccionando a los hijos de los mejores y eliminando a los más débiles
" Tomarán, creo yo , a los hijos de los mejores y los llevarán a la inclusa, poniéndolos al cuidad de unas ayas que vivirán aparte , en cierto barrio de la ciudad; en cuanto a los de los seres inferiores, e igualmente si alguno de los otros nace lisiado, los esconderán , como es debido, en un lugar secreto y oculto". En el siglo XX el gobierno nazi de Adolf Hitler (1889-1945) trató de hacer algo muy parecido con un programa llamado Lebensborn , una forma de reproducción selectiva para promover el crecimiento de una población con los rasgos de lo que ellos consideraban la raza superior aria , personas de pelo y ojos claros, piel blanca y de elevada estatura , mientras que el programa Aktion 4 se dedicaba a eliminar enfermos mentales, niños con taras físicas o mentales o todo aquel que fuera calificado como una persona improductiva. Como os decía al inicio, las utopías de sociedades perfectas tienen tendencia a generar monstruos como Hitler en Alemania, Josef Stalin(1878-1953) en la Unión Soviética o Mao Tse Tung(1893-1976) en China . Por supuesto, no estoy comparando las palabras de Platón con los hechos realizados por estos genocidas del siglo XX,nada más lejos del pensamiento del filósofo griego que la actitud de esos hombres, pero cuando se deshumaniza una sociedad como sucede con el Estado ideal platónico, pueden surgir desviaciones de esta naturaleza, donde el ser humano termina completamente absorbido por el estado y desaparece como individuo. En la sociedad de Platón el Estado llega a intervenir en la vida de los individuos hasta el punto de , como explica Rafael Herrera en su libro, "arrebatar los hijos a las madres para impedir cualquier posibilidad de apego con el objetivo de que la comunidad entera considere a cualquier pequeño como su propio hijo", es decir, se trata de hijos comunales. Aunque hay un elemento positivo en esta sociedad platónica y es que hombres y mujeres, contraviniendo todas las ideas de la época, reciben la misma consideración y trato.
Alejandro Magno(356-323 a.C) representado en el conocido como Mosaico de Issos realizado hacia 325 a.C y en el que se representa al rey macedonio en una batalla contra el rey persa Darío III(380-330 a.C). Sus conquistas ampliaron el hasta entonces reducido mundo griego, que se centraba en el territorio de la polis o ciudad, hasta un imperio global cuyas fronteras se extendían desde Grecia y Egipto al oeste hasta India al este. La utopía de Platón ahora ya no se limitaba a una isla, a una ciudad, a un territorio pequeño, sino que aspiraba a transformar todo el planeta, era una utopía universal, cosmopolita , que proponía la unión de toda la humanidad regida bajo el gobierno de la razón. Este sentido universal sería después heredado por el cristianismo, que también aspiraba a extenderse sin límites de fronteras (Imagen procedente de http://mediateca.cl ) |
De esta forma, afirma Platón en la "República" que "no existe en el regimiento de la ciudad ninguna ocupación que sea propia de la mujer, como tal mujer, ni del varón, como tal varón, sino que las dotes naturales están diseminadas indistintamente en unos y otros seres, de modo que la mujer tiene acceso por su naturaleza a todas las labores y el hombre también a todas" ¿Qué os ha parecido el estado ideal de Platón? Creo que no lo habréis hallado demasiado atractivo , el Estado interviene hasta en los aspectos más personales del individuo que desaparece diluido en el Estado. Sin familia y sin propiedad privada los guardianes y los magistrados viven exclusivamente al servicio del Estado, no hay lugar para el desarrollo personal y en ese sentido la utopía de Platón tiene algo de inhumano, de despersonalizado que convierte su utopía en un estado totalitario donde no hay espacio para la libertad individual. Para terminar con este viaje por la utopía de Platón, comparemos este fragmento de su diálogo en la "República" que ya hemos visto antes "La finalidad que nos hemos fijado de antemano no es la de hacer feliz a una clase o a un individuo, sino a todo el Estado en su conjunto." con estas otras palabras contenidas en el Preámbulo de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos del 4 julio de 1776 "Sostenemos como evidentes por sí mismas dichas verdades: que todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables, que entre estos están la vía , la libertad y la búsqueda de la felicidad ; que para garantizar estos derechos se instituyen entre los hombres los gobiernos, que derivan sus poderes legítimos del consentimiento de los gobernados" Una sociedad que implica la renuncia a la felicidad individual, o al menos a su posibilidad, creo que está llamado al fracaso.
Pero no fue Platón el único utopista del la Grecia Clásica. En la obra de Rafael Herrera , "Historia de la utopía" encuentro a otro pensador griego que describió su propia sociedad utópica. Es considerado padre del género utópico, Evémero de Messina, del que poco se sabe de su vida, ni siquiera su fecha de nacimiento y muerte que se estima que podría ser entre el 330 y el 250 a.c ni tampoco su lugar de nacimiento aunque se cree que tal vez fuera Messina, de ahí su nombre, y en cuanto a su obra apenas se conservan algunos fragmentos de su obra "Inscripción sagrada" donde abriendo una tradición que será seguida muchos siglos después por los utopistas de los siglos XVI y XVII, nos relata un viaje que le lleva hasta una isla en el Océano Índico a la que llama Panquea en la que se desarrolla una ciudad que, como el estado platónico, esta dividido en tres castas "la primera allí es la de los sacerdotes, ; la segunda casta es la de los agricultores ; y la tercera la de los guerreros . Los sacerdotes están al frente de todo, emiten sus juicios en los pleitos y tienen la autoridad en los demás asuntos públicos. Los agricultores que se dedican a trabajar la tierra , ponen sus productos en un depósito común. De igual modo los pastores entregan a la comunidad los animales para los sacrificios y para el resto de los ciudadanos." Al igual que sucedía en el estado de Platón "no está permitido tener algo en propiedad a excepción de una casa y un jardín" Para Evémero esta sociedad no había sido fundada por los dioses sino por hombres ejemplares y sabios que luego el tiempo hizo que terminaran siendo deificados. Es una nueva sociedad cooperativista , donde no existe la propiedad privada y todo se comparte.
San Agustín de Hipona vivió en una época muy turbulenta en el que el Imperio Romano de Occidente comenzaba a descomponerse. En 410 Roma había sido saqueada por las tropas del rey visigodo Alarico I (370-410) y muchos veían próximo el fin de los tiempos. En esa época de zozobra Agustín escribió su propia utopía , la "Ciudad de Dios" basada en la esperanza de la llegada a la Tierra de la Jerusalén celestial , la ciudad perfecta , que se fundará sobre las cenizas de los estados satánicos, las ciudades de los hombres construidas sobre el mal y la sangre desde que Caín, el asesino de Abel, fundara la primera ciudad (Imagen procedente de http://filosofiaantiguaymedieval.wordpress.com ) |
Ahora avanzaremos en el tiempo hasta el siglo I y II d. C. Surgen las primeras comunidades de una religión nueva, se hacen llamar cristianos, los seguidores de Cristo que también creerán en una utopía , la salvación de la humanidad y su viaje a un reino celestial, porque el Estado ideal de estas primeras comunidades cristianas no está en la tierra sino en el cielo basándose en las palabras recogidas en el Evangelio de San Juan cuando Jesús responde a la pregunta del gobernador romano Poncio Pilato "¿Eres tu el rey de los judíos?" (San Juan 18,33) con estas palabras "Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo , mis súbditos lucharían para que yo no fuera entregado a los judíos, Pero mi reino no es de aquí"(San Juan 18, 36-37) Y a ese reino celestial es al que aspiraban ir los cristianos sin importarles a que gobierno pertenecían en este mundo. Pero estas primeras comunidades cristianas tienen ciertos puntos en común con la sociedad utópica de Platón ya que en ellas se comparte todo, los bienes son comunes y no hay propiedad privada "Todos los que habían creído estaban juntos , y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón"(Hechos de los Apóstoles 2,44-47) Cuando con el paso del tiempo el número de cristianos sea cada vez mayor la organización de las comunidades cristianas será cada vez más compleja e irá perdiendo este carácter comunal e igualitario pasando a ser recordado como el tiempo de un cristianismo puro al que muchos aspiraran a regresar. Una vez más el deseo de recuperar un paraíso perdido.
Siguiendo esta utopía celestial de los cristianos, de la esperanza en un reino perfecto fuera de la tierra, su máximo representante sería San Agustin de Hipona(354-430) y su obra "La Ciudad de Dios" donde establece una clara diferencia entre el mundo terrenal en el que vivimos, y el mundo celestial, el mundo perfecto al que aspira a llegar el cristiano, su utopía. Poco se podía hacer para cambiar el mundo terrenal al que consideraba fundado por el mal , estableciendo un antagonismo entre la Ciudad del Hombre, construidos sobre la culpa porque no olvidemos lo que veíamos al principio de este relato , como Caín , el asesino de Abel, era el fundador de la primera ciudad, y en ese sentido todas las ciudades y todos los estados son satánicos en el sentido de que están gobernados por la fuerza y se enfrentan con la Ciudad de Dios, la ciudad perfecta que está llamada a derrotar a la Ciudad de los Hombres al final de la historia. Y a lo largo de ese conflicto se producirán destrucciones globales, como el Diluvio de Noé, para exterminar la corrupción y fundar un nuevo mundo, un proceso que se repetirán en sucesivas ocasiones hasta el triunfo final de la Iglesia de Dios que acogerá en su seno a los elegidos, los buenos y los justos. De nuevo encontramos aquí los elementos característicos de las utopías, el anhelo de un lugar perfecto, la Ciudad de Dios y a continuación la necesidad de destruir las sociedades corruptas para construir sobre sus ruinas un nuevo orden dirigido por unos pocos elegidos, como había sucedido con Noé y su familia en el Diluvio. Un esquema que , como veremos mañana, vamos a encontrar en las utopías del siglo XVI, XVII y XVIII hasta la llegada de la Revolución Industrial , el estallido de la Revolución Francesa y el siglo XIX que traerá consigo nuevas utopías que nos llevarán hasta el comunismo.
Enlace con la segunda parte de Historias de utopía: en búsqueda del mundo perfecto
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Enlace con la tercera parte de Historias de utopía: en búsqueda del mundo perfecto
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