¿Quién no se ha sentado delante de la televisión para ver uno de esos maravillosos documentales sobre la vida de los animales en lugares a los que probablemente nunca podremos viajar?¿quién no ha soñado con ser el cámara que enfoca a la leona que se aproxima sigilosa a una manada de ñus en el Serengueti, o a una familia de orangutanes subidos con aire indolente en un árbol en la isla de Borneo, o a una tribu de caníbales en los Mares del Sur o sobrevolando los espacios infinitos de África desde una avioneta mientras un mundo salvaje y lleno de vida nos recuerda como debió ser en algún momento del pasado nuestro planeta?¿Quién no ha sentido la llamada de la aventura, de la libertad, del peligro que nos hace sentir vivos? EL poeta francés Charles Baudelaire definía así ese deseo de determinadas personas de abandonar la monótona certidumbre de la vida cotidiana en sociedades donde todo está reglamentado y es previsible, por una vida errante, donde el peligro acecha en cada curva del camino pero es precisamente ese peligro lo que te hace vivir con una intensidad desbordante "Los verdaderos viajeros -escribía Baudelaire - son los únicos que parten por partir: corazones ligeros, semejantes a los globos , de su fatalidad jamás ellos se apartan y sin saber por qué, dicen siempre "¡Vámonos!" Y una combinación de ambos, de ese espíritu errante, nómada y aventurero y también del deseo de transmitir a los demás ese mundo al que la mayoría no tiene acceso pero que es necesario que conozcamos para que podamos valorar su importancia, su belleza y la necesidad de protegerlo de su depredación y destrucción, son los protagonistas de hoy, un matrimonio que haría historia porque fueron los pioneros del cine documental y mostraron a los espectadores las imágenes de un mundo que comenzaba a desaparecer. Se llamaba Osa y Martin Johnson
Pero empecemos este relato como debe ser, por el principio, y lo haremos de la mano de la periodista y escritora española Cristina Morató (1961), en cuya obra "Las reinas de África" me basaré para contaros la historia de nuestros dos protagonistas. Primero viajaremos a la localidad de Chanute, en el estado norteamericano de Kansas, donde el 14 de marzo de 1894 nacía Osa Helen Leighty (1894-1953) , en una familia de clase media . Su infancia y adolescencia anunciaba una tranquila vida encaminada al matrimonio, formar una familia y dedicarse a su cuidado que es lo que se esperaba de una joven de su tiempo , probablemente transcurriendo toda su vida en la propia Chanute, pero no era los planes que el destino tenía preparado para ella. El 9 de octubre de 1884 había nacido la persona que impediría que la vida de Osa transcurriera por esos cauces monótonos y previsibles. Se llamaba Martin Johnson (1884-1937), hijo de una familia de emigrantes suecos que habían viajado como tantos otros millones de europeos a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades. Desde muy pronto Martin mostraría su espíritu inquieto y anhelante de aventuras que no armonizaba bien con la disciplina escolar, y con sólo dieciséis años ya fue expulsado del instituto . Dejando los estudios por imposible su padre le puso a trabajar en el estudio fotográfico de la familia en Independence , localidad muy próxima a Chanute donde vivía Osa. Durante los dos años siguientes trabajó como botones y también como fotógrafo , profesión que había aprendido junto a su padre, y con los ahorros que logró reunir pudo permitirse en 1902, con dieciocho años, a cumplir su gran sueño, viajar. Embarcó en un buque mercante rumbo a Londres . Unos años después Martin leería la noticia de que el escritor Jack London (1876-1916), que ya había alcanzado la fama en aquel tiempo gracias a novelas como "La llamada de la selva" o "Colmillo blanco" , estaba organizando un viaje alrededor del mundo a bordo de su barco, el "Snark"
Jack London junto a su segunda esposa Charmian Kittredge London (1871-1955), fotografiados a bordo del Snark en el que también embarcaría Martin Johson en un viaje que cambiaría su vida. El viaje del Snark fue célebre en su momento ya que Jack London era ya un escritor célebre y recibió centenares de cartas de voluntarios que querían navegar con él y realizar aquella vuelta al mundo. Le daba tanta pena rechazar a aquellos jóvenes aventureros que querían compartir con él aquel viaje fabuloso que al final de uno de los capítulos de "El crucero del Snark" donde recoge fragmentos de cartas de algunos de los candidatos a acompañares en el Snark , escribe "Algún día, cuando haya conseguido ganar mucho dinero , construiré un barco muy grande, con espacio para mil voluntarios. Estoy seguro que daríamos la vuelta al mundo porque el espíritu aventurero no ha muerto. Sé que el espíritu aventurero no ha muerto porque he mantenido una larga e íntima correspondencia con él" haciendo referencia a las centenares de cartas que había recibido antes de iniciar el crucero. Entre los pocos afortunados se hallaba Martin Johnson (Imagen procedente de http://www.jacklondonsnark.com ) |
Martin admiraba el espíritu aventurero de London, que además de escritor también había participado en la Fiebre del Oro de Alaska en 1898 , y decidió que esta su gran oportunidad de compartir la aventura con el escritor . Le escribió como otros centenares de jóvenes, para proponerse como candidato para formar parte de su tripulación. Según nos cuenta Cristina Morató cuando Jack London recibió la carta de Johnson le respondió escuetamente "¿Sabe usted cocinar?Jack London" Y como a veces , para alcanzar los sueños, no se puede decir toda la verdad, aunque lo suyo no era la cocina Martin respondió que si y se convirtió en un miembro más del "Snark" que en abril de 1907 zarpaba desde San Francisco para emprender su viaje alrededor del mundo que estaba previsto que se prolongara durante cuatro años. A los que tengáis interés en conocer las vicisitudes de este viaje os recomiendo la lectura de "El crucero del Snark. Hacia la aventura en el Pacífico Sur" en el que Jack London relató las aventuras y desventuras de aquel viaje que finalmente tuvieron que interrumpir a finales de 1908 cuando sólo llevaban un año y medio de viaje debido en gran parte a las enfermedades , en particular las "llagas de Salomon" , contraídas durante su periplo por las islas Salomon y que Jack London describía así "Basta una picadura de mosquito, un corte, o la más mínima abrasión, para que la herida se infecte con un veneno que parece ser que se difunde por el aire. Inmediatamente, la úlcera empieza a comer. Y come en todas las direcciones, consumiendo piel y músculo con una sorprendente rapidez. El primer día , la úlcera parece un simple pinchazo, al segundo día es del tamaño de una moneda pequeña y al final de la semana ya no se puede tapar con un dólar de plata"
El viaje no pudo concluirse pero el libro de Jack London contando las vicisitudes de la aventura fue un éxito y Martin Johnson también sabría sacar provecho . Durante la aventura a bordo del Snark Martin había tomado muchas imágenes de los lugares por los que habían pasado, lugares que con solo nombrarlos traían a la mente escenas de un mundo exótico como Bora Bora, Fidji, Tahíti o Hawai y un amigo convenció a Martin para que proyectase aquellas fotografías en un teatro de Kansas. Fue un gran éxito y así nació un espectáculo al que puso por nombre "Viaje por los Mares del Sur con Jack London" pues era consciente que el nombre del escritor atraía al público. El espectáculo lo ofrecía en Independence que, como sabemos , estaba muy cerca de Chanute, donde en 1910 vivía Osa , entonces de dieciséis años de edad y llevando una vida sin sobresaltos. Pero Osa tenía una amiga llamada Gail Perigo(1893-1984) que trabajaba en el espectáculo de Martin y la invitó para que se acercara a Independence para asistir a una de las representaciones Fue allí donde aquella jovencita de apenas dieciséis años conoció a Martin Johnson, que a sus ojos ya debía aparecer como un apuesto fotógrafo que había vivido increíbles aventuras y al que mucho trataban como un auténtico héroe. Sin embargo, no parece que ella quedará seducida al instante y fueron las frecuentes visitas que desde entonces la hizo Martin lo que hizo nacer el amor en Osa. Mientras, su amiga Gail se casaba con un amigo de Martin, Richard Hamilton (1883-1955) y abandonaba el espectáculo por lo que Martin no dudó en ofrecerle el papel a la joven Osa que nunca había actuado delante del público. Pero subió al escenario y a pesar de su timidez, comenzó a cantar y tuvo un gran éxito. Acababa de nacer una actriz y también acababa de cambiar su vida aunque ella aún no lo sabía.
Una fotografía de una joven y bella Osa Johnson vestida al estilo hawaiano. Hasta el día que se encontró con Martin en Independence ella no había conocido otro mundo que el de su ciudad natal así que os podéis imaginar la impresión que causarían en la muchacha los relatos que Martin la contaba sobre sus aventuras a bordo del Snark . Con el tiempo estaba destinada a convertirse en una auténtica heroína , la mujer intrépida y valiente a la que todas las mujeres admiraban. Como escribe Cristina Morató "Era la chica rubia en el corazón de un mundo salvaje" con la diferencia de que ella no representaba un papel en un argumento de ficción sino que era la protagonista en documentales donde los Johnson se jugaron la vida en muchas ocasiones (Imagen procedente de http://oldscrolls.files.wordpress.com ) |
Según relata Cristina Morató aquel mismo día Martin la propuso el matrimonio , aunque ella aún tenía sólo dieciséis años y Martin temía que se opusieran al casamiento con un hombre que tenía diez años más que ella, pero fue todo lo contrario, Martin ya había alcanzado cierta celebridad gracias al viaje con Jack London y el espectáculo del Snark así que podía ser un buen partido para su hija. La petición había llegado por sorpresa .La noche en que Osa había actuado por primera vez ante el público, Martin la acompañó a la estación de ferrocarril para que tomara el tren de Independence a Chanute de regreso a casa. Estaban sentados esperado el tren cuando Martin la preguntó "¿Te casarás conmigo?" a lo que ella respondió con sencillez "Si". De esta forma se convirtieron en el matrimonio de Martin y Osa Johnson, pero si sus amigos y parientes esperaban que fueran a comportarse como una pareja convencional que no tardase en tener hijos y se establecieran en una casa con jardín y perro, el sueño americano, estaban muy equivocados. Martin seguía anhelando una vida de viajes y aventuras, quería completar la vuelta al mundo que Jack London no había podido concluir. Por supuesto para eso había que reunir un dinero que no tenían así que propuso a su joven esposa que siguieran con el espectáculo del Snark por todo Estados Unidos y si hacía falta venderían hasta los regalos de boda y los muebles de la casa para poder pagar aquel viaje. ¿Qué respondió Osa a esta propuesta? Ella no sabía nada de lo que había más allá de Chanute e Independence , al margen de lo que había visto en las imágenes de Martin de su gran viaje, pero la respuesta demostraba el valor y espíritu intrépido de Osa que la caracterizaría durante toda su vida "Cariño, donde pretendes ir, ¿hay caníbales?".
Y de esta forma comenzó un periodo de seis años de constantes viajes por toda la nación en el que actuaron en pequeños pueblos , viajaron en trenes de segunda clase y se alojaron en los hoteles más baratos que podían encontrar, pero el ánimo de los dos esposos no flaqueaba y la ilusión de la meta les mantenía entusiasmados . Por fin llegó el día en el que reunieron el dinero suficiente para emprender su sueño, el gran viaje . Como había hecho Martin diez años antes, en julio de 1917 Osa y Martin Johnson embarcaban en la Bahía de San Francisco . Cristina Morató describe el pequeño equipaje que llevaban para afrontar aquella gran aventura "Viajaban con una cámara de manivela, dos cámaras fotográficas con placas, un rifle de Jack London (que había muerto el año anterior) regalo de su esposa, dos revólveres automáticos y dos mil metros de película para filmar" Osa Johnson, que entonces era una bella y sonriente joven de veintitrés años , recordaba como su familia y amigos se habían quedado estupefactos ante aquel viaje a lo desconocido "Una locura, decían nuestros amigos, vais a perderlo todo, hasta la camisa, repetía mi padre, y mi madre estaba convencida de que moriríamos de fiebres o en una olla hervidos, o peor, que los caníbales nos comerían crudos" Porque ya que te comen sería menos doloroso cocinado, al menos eso debía pensar la madre de Osa. Y así comenzaron aquel viaje en el que esperaban encontrar a los caníbales y mostrárselos a todo el mundo, y así lo recordaba Osa "Estábamos decididos a demostrar al mundo la existencia de caníbales ya fuera en fotografías o filmados. Plasmaríamos en imágenes su vida cotidiana, y con un poco de suerte, un verdadero festín caníbal" Recordemos que estamos en 1917 y ya podéis suponer que impresión podría causar en el espectador de aquel tiempo unas escenas como esas.
Para que podáis situar los lugares por los que estaban viajando los Johnson os incluyo este mapa de Oceanía. Entre las costas de Australia y Nueva Guinea podéis ver las Islas Salomon y las Nuevas Hébridas , actualmente Vanuatu, donde los Johnson encontraría lo que tanto anhelaban hallar, las últimas tribus antropófagas. Tal vez podáis pensar que la forma en que se aproximaban a estos pueblos no eran muy respetuosos hacia ellos, pero hay que verlo con los ojos de entonces, el segundo decenio del siglo XX. Aún a comienzos del siglo XX existían los zoos humanos por lo que los documentales de los Johnson era un paso gigantesco para conocer mejor y acercarse a aquellos pueblos que entonces eran considerados simplemente como "salvajes". Los Johnson contribuirían a cambiar esa visión (Imagen procedente de http://manu-diversificacion.blogspot.com ) |
Navegaron por el Pacífico, pasaron por Hawaii, Samoa y las islas Salomon, donde el viaje del Snark se había truncado por las enfermedades. El archipiélago de las Salomon había sido descubierto por el navegante español Alvaro de Mendaña (1541-1595) en 1568 , pero aunque hubo un intento de colonización ni los españoles primero ni holandeses, británicos o franceses se establecerían allí hasta que a mediados del siglo XIX las potencias europeas volvieron a fijar su atención en las islas y en particular de los misioneros y de los llamados Blackbirding, un término que se utilizaba para referirse a traficantes de esclavos que engañaban a los indígenas para convertirlos en esclavos que luego eran llevados a trabajar en Queensland y Nueva Gales del Sur en Australia. Pero cuando los Johnson llegaron allí aun pudieron conocer como era la vida tradicional de los habitantes de las Salomon. Mientras Osa hablaba y compartía la vida cotidiana de los indígenas Martin no dejaba de filmar , imágenes que eran un testimonio antropológico de una forma de vida que estaba a punto de desaparecer pero aún buscaban algo más, a los antropófagos. Siguieron navegando por los Mares del Sur hasta alcanzar las Nuevas Hébridas , vecinas de las Salomon. Hoy conocidas como las islas Vanuatu, son vecinas de las Salomon y están formadas por ochenta y tres islas . Descubiertas también por los españoles en el siglo XVII y colonizadas en el siglo XVIII por ingleses y franceses, cuando los Johnson llegaron todavía había algunas islas que no habían recibido influencia de los europeos, entre ellas la isla de Malakula, la segunda más grande del archipiélago, donde les habían dicho a los Johnson que aun se practicaba el canibalismo.
A pesar de que les aconsejaron no ir hasta allí, porque los europeos que se adentraron en sus selvas no regresaron, a nuestros intrépidos protagonistas no les importó. Al llegar a la isla se encontraron con el pueblo Bib Nambas, que estaba gobernado por el rey Nihapat, que tenía fama de ser un líder sangriento. Les condujeron a su presencia . Allí estaban Martin y Osa, rodeados de un pueblo hostil, con fama de practicar el canibalismo y que se mostraban cada vez más agresivos. Escribe Morató que en ese momento Martin le dijo a Osa "¿No querías auténticos salvajes? Pues aquí los tienes" Mientras, Martin no perdió la oportunidad de filmar aunque era consciente del peligro que corrían. Osa recordaría luego la sensación que le causó la aparición del rey Nihapat "Su presencia era aterradora y a la vez magnífica, era consciente de su poder y nos miraba con curiosidad y recelo" La escena nos recordaría la de aquellas antiguas películas de los años treinta del siglo pasado, con los tam tam sonando en el interior de la selva , hombres desnudos empuñando lanzas, con las narices perforadas por un hueso y una actitud cada vez más hostil . Martin comprendió que les iban a capturar y antes de que pudieran abalanzarse sobre ellos comenzaron a correr por la selva camino de la playa , sin soltar la cámara a pesar de la proximidad de la muerte . Cuando llegan a la playa ya no tienen hacia donde huir, estaban a punto de morir pero la suerte estaba de su parte y una patrulla británica que se hallaba inspeccionando la costa de la isla los vio y acudió en su auxilio.
FRAGMENTOS DE AMONG THE CANNIBAL ISLES OF THE SOUTH SEAS (1918)
Son dos fragmentos del primer documental que rodaron juntos Martin y Osa Johnson durante su viaje por los Mares del Sur y la visita a los archipiélagos de las Salomon y las Vanuatu en la que buscaban a las tribus antropófagas
FRAGMENTOS DE AMONG THE CANNIBAL ISLES OF THE SOUTH SEAS (1918)
Son dos fragmentos del primer documental que rodaron juntos Martin y Osa Johnson durante su viaje por los Mares del Sur y la visita a los archipiélagos de las Salomon y las Vanuatu en la que buscaban a las tribus antropófagas
Habían salvado su vida y también unas imágenes espectaculares que les harían famosos. Regresaron a Estados Unidos y el 21 de julio de 1918 se estrenaba en Nueva York "Entre los caníbales de los Mares del Sur" que además de ser un gran éxito les convierte en estrellas y en pioneros del cine documental. Los espectadores no habían asistido nunca a una historia como esta llena de acción, de humor, de suspense, con la encantadora presencia de Osa y además con unos escenarios deslumbrantes , llenos de animales salvajes y tribus que aún se mantenían al margen de la civilización y todo ello real . Si eso hoy todavía consigue atrapar nuestra atención imaginad lo que supondría para un espectador de 1918 que descubría un mundo que hasta entonces sólo había podido contemplar en dibujos y fotografías. Pronto emprenderían un nuevo viaje, ahora a la isla de Borneo, pero la selva de Borneo no era el escenario luminoso de los Mares del Sur, sino un lugar húmedo, asfixiante y sombrío , donde la cámara de Martin no podía apenas filmar imágenes que le sirvieran para su documental. Todo parecía apuntar hacia el fracaso de este viaje hasta que Osa compró una cría de mono gibón a la que puso el nombre de Kalowatt , que se convirtió en su compañera . Martin se dio cuenta que podía filmar a Kalowatt y lo mismo podía hacer con otros animales cautivos que luego pondría en los escenarios naturales de la isla como si los hubiera filmado en libertad. Hoy esto nos parecería un fraude para los espectadores, pero los Johnson no lo hacían con esa intención, sino con la de mostrar un mundo exótico y salvaje con los medios de que disponían entonces. Las condiciones de rodaje fueron durísimas y acabaron exhaustos pero el resultado fue un nuevo documental , "Aventuras en la jungla" estrenada en 1921 y que también sería un gran éxito.
Fotografía de Osa y Martin Johnson durante el viaje de regreso desde Borneo en 1920 llevando Osa en sus brazos a Kalowatt y Martin a la orangután Bessie . Esta última les daría bastantes quebraderos de cabeza . Precisamente durante la travesía en la que regresaban a América Bessie, que así se llamaba la cría de orangután, se escapó de la jaula en la que la tenían y tocó la alarma de incendios del barco causando la alarma de pasajeros y tripulantes que llegaron a evacuar la nave hasta que se descubrió que se trataba de una falsa alarma . Los Johnson tuvieron que correr con los gastos causados por la travesura de Bessie y finalmente, tras nuevos incidentes en Nueva York, tuvieron que regalarla al zoológico de la ciudad. Kalowatt si les acompañaría en su siguiente viaje a África (Imagen procedente de http://safarimuseum.com |
Además no habían vuelto solos de aquel viaje pues Osa traía consigo a Kalowatt y también a una cría de orangután a la que puso el nombre de Bessie y se alojaron con ellos en un apartamento en Nueva York. Tienen el reconocimiento del público y de la crítica pero ahora tenían que buscar un nuevo reto y este les iba a llegar por parte de un conocido y prestigioso biólogo, fotógrafo de la naturaleza y conservacionista , Carl Ethan Akeley (1864-1926). Akeley era de las primeras voces que se levantaban para solicitar la protección de los espacios naturales y la vida salvaje que estaba amenazada por la caza indiscriminada y la proliferación de los grandes safaris que estaba acabando con las grandes manadas de animales en África. Trabajaba para muchos museos, entre ellos el Museo de Historia Natural de Nueva York y estaba empeñado en crear una sala dedicada a África en la que mostraría al público la belleza natural del continente africano y así podría difundir la necesidad de conservar aquella maravilla antes de que fuera demasiado tarde. El problema, como siempre , era lograr la financiación y fue entonces cuando se le ocurrió que la mejor forma de lograrlo sería contar con los Johnson para que viajaran a África, rodaran uno de sus brillantes documentales y con la recaudación obtenida el Museo podría construir su anhelada sala africana. Akeley contactó con los Johnson. El destino sería el África Oriental Británica, que coincidía aproximadamente con lo que hoy es Kenia y el Museo se encargaría de correr con los gastos de la expedición. Era una oportunidad que no iban a desaprovechar, un territorio nuevo , lleno de vida salvaje, de tribus y con unos medios superiores a los que hasta ahora habían dispuesto. Los Johnson dijeron que si y lo que no sabían es que con su respuesta daban comienzo a catorce años de aventuras en África que les convertirían en leyenda. Pero eso lo veremos mañana en la segunda parte de su historia, la de los pioneros de los documentales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario