En la segunda parte de esta historia fuimos testigos de los cuatro primeros meses de vida de la Primera República Española proclamada el 11 de febrero de 1873, el mismo día en que el rey Amadeo I de Saboya (1845-1890) había enviado la carta de abdicación para ser leída en las Cortes. Asistimos tanto a la acogida entusiasta de la República como a la casi inmediata inestabilidad que comenzó a extenderse por una España inmersa en dos conflictos militares , la guerra con los independentistas cubanos iniciada en 1868 y que se prolongaría hasta 1878, y el antiguo conflicto interno con los carlistas que se reinició en 1872 en la Tercera Guerra Carlista. A ello había que sumar movimientos de protesta de obreros y campesinos e incluso la declaración de independencia de Cataluña en dos ocasiones. Tal era la inestabilidad en estas semanas iniciales de la recién nacida República que su primer presidente , Estanislao Figueras y Moragas (1819-1882) presentó su dimisión el 24 de febrero aunque gracias a la acción de su ministro de Gobernación , Francisco Pi y Margall(1824-1901), la situación se pudo reconducir y Estanislao retornó a su cargo como presidente de la República. Sin embargo, la estabilidad no llegaba , se sucedían intentos de golpe de estado y también las luchas internas entre las diferentes corrientes en las que estaban divididos los políticos republicanos . Recordemos que existía un ala moderada, liderada por Emilio Castelar (1832-1899) que antes de dar cualquier paso consideraban indispensable la redacción de una nueva Constitución que estableciera el nuevo marco legal de convivencia, otra corriente con Francisco Pi y Margall a la cabeza que defendía la construcción de una República Federal hecha de arriba hacia abajo, es decir, partiendo de una Constitución que fijara las características de esta nueva estructura de estado para desarrollar desde ella los diferentes estados que conformarían esa República Federal, y por último teníamos a los llamados intransigentes, sin un líder claro, y cuyos planteamientos eran más radicales, pues pensaban que la República Federal debería ser construida desde abajo hacia arriba, lo que significaba que no consideraban preciso la redacción de una Constitución para proceder ya a la división de España en tantos estados y cantones como fuera posible y que serían proclamados por los propios ciudadanos.
En junio habían comenzando las reuniones para la redacción de la nueva Constitución y vimos como el 8 de junio se votaba su primer artículo donde se proclamaba que "la forma de gobierno de la Nación española es la República democrática federal" , una república federal que estaría integrada por diecisiete estados . Pero esto no era suficiente para los intransigentes que consideraban que cualquier provincia , ciudad e incluso municipios de menor tamaño podían constituir sus propios estados o cantones. Después de conocer que varios miembros de la corriente intransigente estaban preparando un golpe de estado , y ante el clima de tensión e inestabilidad que se extendía por toda España, Estanislao Figueras presentaba su dimisión el 9 de junio y abandonaba España rumbo a Francia. Le reemplazó Francisco Pi y Margall, convirtiéndose el 11 de junio de 1873 en el segundo presidente de la República. Nada más asumir el cargo Margall observa como se le acumulan los problemas entre la rebeldía de los intransigentes y el desarrollo de la tercera guerra carlista. Pi y Margall pidió poderes especiales a las Cortes para hacer frente a tantos desafíos y le fueron concedidos el 30 de junio entre las protestas de los intransigentes que consideraban que esos poderes especiales eran un atentado contra la democracia y un recorte de los derechos individuales, aunque los poderes especiales que había recibido Margall se limitaban a los dos escenarios de mayor inestabilidad por la guerra carlista, Cataluña y las Vascongadas. El día 1 de julio los diputados de la corriente intransigente del republicanismo abandonaban las Cortes y aunque le echaban al presidente de la República en cara la solicitud de esos poderes especiales, lo que en realidad criticaban es que Margall no hubiera prescindido de las Cortes y de la redacción de una Constitución para dar rienda suelta a que la República Federal hubiera sido construida de forma espontánea por los ciudadanos, constituyendo por sí solos sus propios estados.El día 2 de julio el único diputado de la corriente intransigente que había permanecido en las cortes, José Navarrete, le echaba en cara a Margall los argumentos que os acabo de exponer a lo que Margall replicaría con estas palabras.
"Lo que pretende el Sr Navarrete y sus epígonos es que el Gobierno debería haber sido un gobierno revolucionario que debería haberse arrogado una cierta dictadura, dejando de contar con las Cortes Constituyentes " Y continúa Margall "Si la república hubiese venido de abajo a arriba (como ya sabemos esto quiere decir que se formaran los estados federales antes de que estuviera redactada la Constitución y sin ningún marco legal que estableciera los límites para su desarrollo) , las provincias habrían empezado por constituirse en cantones y hubiese desaparecido el poder central. Entiendo que habríamos llegado, mas o menos tarde, a reconstituir la unidad nacional estableciendo una República como todos deseamos; pero habríamos atravesado un período largo, trabajoso y muy propicio a conflictos y perturbaciones; mientras que ahora, por medio de las Cortes Constituyentes, conviniendo todos en que ellas deben definir la forma de gobierno, hemos salvado grandes escollos y traído la República Federal sin grandes perturbaciones , sin estrépito, sin sangre" Y añadía "No se realizan los deseos de los pueblos promoviendo insurrecciones, que son siempre una calamidad para las sociedades, se logran los deseos de los pueblos propagando las ideas, llevándolas a comicios cuando los comicios se abran, explicándolas después con fuerza y con ímpetu en las Cortes cuando las Cortes estén abiertas , y no retrayéndose como se retrajo la minoría ayer(se refería a la marcha de los diputados de la corriente intransigente) Influya el señor Navarrete para que ese retraimiento sea pasajero y para que pronto vemos a todos los diputados en los bancos" Pero a pesar de las palabras de Margall la República no había salvado los peores escollos , porque los diputados intransigentes que habían abandonado las Cortes estaban decididos a alentar la formación de los cantones sin esperar a que las Cortes terminaran la redacción de la Constitución . Durante las siguientes semanas en diferentes ciudades de España el poder iba a ser asumido por juntas revolucionarias , sobre todo en localidades de Valencia, Murcia y Andalucía.
Pero la revolución cantonal iba a tener un prólogo cuyo origen no era la independencia de una ciudad sino una protesta de los trabajadores. El 7 de julio se inicia una huelga general en Alcoy , en la provincia de Alicante. Era entonces una ciudad de treinta mil habitantes y una de las más industrializadas de España pues cerca de un tercio de su población , alrededor de unas diez mil personas, trabajaba en las industrias papelera y textil asentadas en la localidad, aunque las condiciones eran muy duras , con jornadas de trabajo que superaban las doce horas y sueldos bajos, además de la falta de seguridad en el puesto de trabajo motivo de muchos accidentes. Después de que el 8 de junio se hubiera proclamado la República Federal, como ya hemos visto, la Federación Regional Española de la Asociación Internacional de Trabajadores (FRE-AIT), creada en 1870, consideró que era el momento de llevar a cabo una revolución social. El 7 de julio la comisión de la FRE-AIT reunió a los trabajadores de Alcoy en la plaza de toros de la ciudad para convocarles a la huelga general con el objetivo de exigir un aumento salarial del 20% y una reducción de la jornada laboral de doce a ocho horas. El 9 de julio los empresarios rechazaron las exigencias de los trabajadores y contaron con el apoyo del alcalde de Alcoy, Agustí Albors (1822-1873) del Partido Republicano Federal. Los miembros del comité del FRE-AIT exigieron la dimisión del alcalde y su sustitución por una junta revolucionaria. Hubo una entrevista entre Albors y los líderes del comité del FRE-AIT, pero mientras tenía lugar en el ayuntamiento esta reunión en el exterior hubo un enfrentamiento entre la multitud congregada ante el ayuntamiento y la policía municipal que terminó disparando para que se disolvieran causando varios heridos y un muerto. La mecha de la revolución prendió , los trabajadores tomaron las armas y se adueñaron de las calles , secuestraron a decenas de empresarios y prendieron fuego a algunas fábricas mientras que el alcalde junto a treinta y dos policías trató de hacerse fuerte en el ayuntamiento , esperando la llegada de los refuerzos que había solicitado al Gobierno en Madrid . Sin embargo no daría tiempo a que estos refuerzos llegaran, porque el 10 de julio el ayuntamiento fue incendiado y el alcalde y siete policías fueron asesinados muriendo en la refriega un total de quince personas, de las que sólo dos pertenecían a los insurrectos
Los insurrectos establecieron un Comité de Salud Pública que gobernó Alcoy durante tres días hasta que el 13 de julio hicieron su entrada las tropas del gobierno asumiendo el control de inmediato y deteniendo a más de medio millar de obreros que en los años siguientes fueron paulatinamente amnistiados hasta ser liberados todos ellos. Sin embargo, aunque la huelga general de Alcoy , que luego sería conocida conocida como la Revolución del Petróleo, no forma parte de la Revolución Cantonal, si refleja la tensión que se respiraba en muchos lugares . En Madrid los intransigentes habían creado un Comité de Salud Pública dirigido por el filósofo y político Roque Barcia Martí (1821-1885) cuyo objetivo era dirigir la insurrección de los cantones. Aunque en un primer momento pretendieron llevarlo a cabo en Madrid no se daban las condiciones adecuadas para ello así que fijaron un nuevo objetivo, la ciudad de Cartagena, en la provincia de Murcia, y uno de los puertos más importantes de la Península. Así, en la madrugada del 12 de julio de 1873 , los insurrectos dirigidos entre otros por el político y médico Manuel Cárceles Sabater (1850-1933) asaltaron y ocuparon el ayuntamiento de Cartagena estableciendo la Junta Revolucionaria de Salvación Pública exigiendo que se proclamarse la creación del Cantón Murciano. El alcalde de Cartagena informó aquella mañana al Gobierno en Madrid de esta exigencia y la respuesta que llegó vino de mano del gobernador civil de Murcia, Antonio Altadill (1828-1880) que envió un telegrama al alcalde de Cartagena donde le conminaba a que "diga usted a la Junta en nombre mío y del Gobierno , que la Comisión de las Cortes tiene acordado el Cantón murciano; en breve será un hecho este acuerdo" y le animaba a que "Resista hasta donde pueda la dimisión del ayuntamiento" y le rogaba que "evite apelar a las armas y el derramamiento de sangre" Cuando por fin llegó a Cartagena Altadill lo haría acompañado por el diputado federal murciano Antonio Gálvez Arce (1819-1898) Comprobaron que los insurrectos liderados por Cárceles Sabater controlaban los principales edificios de la ciudad y también sus fortalezas, aunque no habían podido apoderarse de los buques militares atracados en el puerto.
Arce recomendó que el ayuntamiento presentara su dimisión y así se hizo con la aprobación del gobernador civil, Altadill, lo que dejaba despejado el camino para la formación del Cantón Murciano, al que también se da en ocasiones el nombre de Cantón de Cartagena. De esta forma , la tarde del 12 de julio de 1873 se procedía a la proclamación formal del Cantón Murciano con esta declaración "Proclamada como forma de gobierno para España la República Federal, el pueblo republicano, en su inmensa mayoría reclamaba, como imperiosamente exigían las circunstancia, que se organizase la Federación estableciendo inmediatamente la división regional de los cantones y dando a estos y al municipio la autonomía suspirada hace tanto tiempo. " Pero la impaciencia por alcanzar estos objetivos había precipitado los acontecimientos acusando al Gobierno de inmovilista "Pero el pueblo, ansiosísimo de estas reformas, sediento de esta redención tan deseada , veía prolongarse indefinidamente sus momentos de agonía, veía amenazada la República de un golpe de muerte y no veía, ni en el gobierno ni en la Cámara Constituyente una predisposición para la inmediata ejecución de estas reformas y cree que sin ellas se perdería indudablemente para muchísimos años la libertad en esta tierra de España" y por ello "Era llegada la hora de salvar, de constituir definitivamente la República Federal y que no hacer esto sería tanto como cometer una indignidad que no podemos suponer en ningún pecho republicano donde se albergue y lata un corazón de hombre " Es decir , según esta proclama se trataba de salvar la República de lo que ellos consideraban que era un final cercano y eso justificaba que "el pueblo se haya puesto en armas, porque ha creído ver en inminente riesgo la santa causa de la República Federal." y concluía "Aquí no hay verdugos ni víctimas, opresores ni oprimidos , sino hermanos prontos a sacrificarse por la libertad y la felicidad de sus conciudadanos. ¡Viva la República Federal!¡Viva la soberanía del pueblo" Al frente del recién proclamado Cantón Murciano fue puesto el propio Antonio Gálvez Arce y dos días después los buques de guerra atracados en el puerto de Cartagena izaron la enseña roja del Cantón. Entre ellas estaban las fragatas blindadas Numancia, Vitoria, Tetúan y Méndez Núñez, la fragata de hélice Almansa, el vapor de ruedas Fernando el Católico y la corbeta Ferrolana.
Al frente de las tropas del Cantón Murciano se puso el general Juan Contreras y San Román (1807-1881) que había sido capitán general de Cataluña entre febrero y marzo de ese año y había destacado como uno de los líderes de los intransigentes. El 15 de julio el general Contreras hacía público un manifiesto en el que pedía al ejército del Gobierno de Pi y Margall que no abrieran fuego "ni contra el pueblo ni contra sus hermanos de armas" y prometía que "No envainaré mi espada hasta que el pueblo tenga su soñada federación, Nuestra conducta será ayudar a los pueblos que deben ser libres"La proclamación de la independencia del Cantón Murciano fue la señal para que en los días siguientes se sucedieran las proclamaciones de nuevos cantones por toda España. El 17 de julio se proclamaba el Cantón de Valencia, el 19 de julio los cantones de Sevilla, Tarifa, Torrevieja, Cádiz y Almansa, el 20 de julio les llegó el turno a los cantones de Alicante y Granada, el 21 de julio se crearon los cantones de Málaga y Castellón, el 22 de julio lo harían los de Algeciras, Andújar, Bailén, Béjar y Motril, el 23 de julio Córdoba y Gualchos, y el 24 de julio Salamanca . Son sólo algunas de las ciudades y localidades que en aquellos días se unieron a la revolución de los cantones.Las Juntas que se formaban para el gobierno de los cantones coincidían en tomar una serie de decisiones como la adopción de medidas beneficiosas para los trabajadores, la eliminación de impuestos sobre el consumo de productos populares como los que había sobre el tabaco y la sal, la expropiación de los bienes de la Iglesia , la sustitución del ejército gubernamental por milicias populares y la concesión del indulto a los presos políticos. Incapaz de detener la rebelión cantonal el gobierno de Pi y Margall perdió el apoyo de las Cortes el 17 de julio y un día después el presidente presentaba su dimisión ."Entiendo yo - diría Pi y Margall - que dada la grave situación del país y los grandes peligros que amenazan a la República y a la Patria sólo será posible un ministerio en que aunadas en un sentimiento común todas las fracciones de la Cámara , pudiese hacer frente a las necesidades de la guerra y contener el movimiento de disgregación que ha empezado en algunas provincias". El segundo gobierno de la República había durado apenas treinta y siete días.
El mismo día de la dimisión de Pi y Margall sería elegido por las Cortes como tercer presidente de la República el filósofo, abogado y político Nicolás Salmerón (1838-1908) que ya había sido ministro de Gracia (Justicia) durante el gobierno de Estanislao Figueras, donde promovió la abolición de la pena muerte y la separación del poder judicial del ejecutivo. Pero era un republicano moderado por lo que su elección lejos de calmar a los insurrectos animó la rebelión porque muchos pensaban que bajo el gobierno de Salmerón sería imposible la formación de una República Federal. Lo cierto es que el nuevo presidente tenía que enfrentarse a una situación crítica. Continuaban las guerras en Cuba contra los independentistas y la guerra contra los carlistas a lo que había que sumar los cantones sublevados , por lo que a finales de aquel mes de julio había entre carlistas y los rebeldes de los cantones treinta y dos provincias sublevadas . Por cierto, es posible que os resulte curioso que no haya nombrado a Cataluña, pero en ella el movimiento cantonal no tuvo fuerza porque era uno de los escenarios en el que se desarrollaba la guerra contra los carlistas. Salmerón decidió adoptar una política de mayor dureza que su predecesor, comenzando por destituir a todos los cargos que de una u otra forma habían ayudado o mostrado sus simpatías por la rebelión cantonal, desde gobernadores civiles a alcaldes y también a los miembros del ejército al tiempo que se hizo rodear de generales que eran contrarios a la República Federal pero en los que podía confiar para sofocar la rebelión, entre ellos los generales Manuel Pavía (1827-1895) y Arsenio Martínez Campos (1831-1900). A Martínez Campos el presidente Salmerón le ordenó someter a los rebeldes de los cantones de Valencia y Almansa mientas que Pavía se dirigió a Andalucía para sofocar la rebelión los cantones de esa región . Entre tanto, el 18 de julio el vapor Fernando el Católico zarpaba del puerto de Cartagena para llevar refuerzos a a los insurrectos en las poblaciones de Mazarrón y Águilas (ambas en la provincia de Murcia) y animarles a unirse al Cantó Murciano. El 20 de julio la fragata Vitoria también dejaba el puerto de Cartagena rumbo a Alicante llevando a quinientos hombres con el objetivo de extender la rebelión y proclamar el Cantón de Alicante.
Durante el trayecto la Almansa apresaría a tres barcos. Estas primeras misiones fueron un un éxito porque Mazarrón y Águilas se unieron al cantón Murciano y en Alicante se estableció también un cantón, pero en esta última apenas tres días después el gobierno recuperaba el control . Después de la acción de la fragata Almansa Nicolás Salmerón publicó el 21 de julio de 1873 un decreto por el cual los barcos de guerra que habían quedado en manos del Cantón de Cartagena fueron declarados piratas . En el artículo 1 de aquel decreto se establecía que "Las tripulaciones de las fragatas de la Armada Nacional "Almansa", "Vitoria" y Méndez Núñez", del vapor "Fernando el Católico" y la de cualquier otro buque de guerra de los sublevados en el Departamento de Cartagena , serán considerados como piratas al encontrársele en los mares juridisccionales de España o fuera de ellos, por fuerzas navales o extranjeras con arreglo a los artículos 4º,5º y 6º de las Ordenanzas Generales de la Armada" y en el Artículo 2 del decreto anunciaba que "Los comandantes de los buques de guerra de las potencias amigas de España, quedan autorizados para detener a los buques mencionados en el artículo 1º, y juzgar a los individuos que los tripulen en el concepto que el mismo expresa; reservándose el Gobierno español la propiedad de los buques , previas las correspondientes reclamaciones por vía diplomática" Esto significaba que cualquier navío tanto español como extranjero estaba autorizado a interceptar los navíos bajo el mando del Cantón Murciano. La Junta del Cantón Murciano enviaba expediciones por mar y tierra para tratar de extender la rebelión cantonal pero también para obtener provisiones y dinero para mantener a los nueve mil hombres que se hallaban en Cartagena. Tras la declaración de piratería publicada el 21 de julio al día siguiente las autoridades del Cantón respondieron declarando a los miembros del Gobierno en Madrid "traidores a la patria y a la República Federal" Pero la declaración de piratería no tardaría en surtir efecto El 23 de julio uno de los barcos que los insurrectos del cantón Murciano habían capturado y que ahora se hallaba en su poder, el Vigilante, fue interceptado y capturado por la fragata alemana Friedrich Karl y tras liberar a su tripulación llevaría el barco hasta Gibraltar, colonia inglesa, desde donde sería devuelto al gobierno español.
Pero dejemos de nuevo Cartagena para regresar junto al general Pavía que el 21 de julio dejaba Madrid para emprender su avance hacia el sur para sofocar la revolución cantonal en Andalucía. A su llegada a Córdoba la rebelión cantonal en la ciudad ya había sido conjurada así que su siguiente objetivo fue el Cantón de Sevilla . Dejó Córdoba el 26 de julio . Dos días más tarde comenzaban los combates contra los insurrectos sevillanos librando duros combates que se prolongarán hasta el 30 de julio , cuando las fuerzas de Pavía entran en el ayuntamiento sevillano y el 31 de julio completan el control de la ciudad. Se estima que las bajas de Pavía fueron unos trescientos hombres pero ignoramos el número de víctimas entre los defensores del cantón ya que nadie las contó. El 1 de agosto Pavía entraba victorioso en la Sevilla , mientas que sus tropas recorrían toda la provincia para sofocar cualquier intento de rebelión. Al día siguiente, 2 de agosto, Pavía abandonaba Sevilla para continuar su avance hacia el sur. El 3 de agosto los cantonales son expulsados de Jerez de la Frontera y Pavía se planta ese mismo día ante las puertas de Cádiz, donde se había proclamado el Cantón el 19 de julio. Las autoridades cantonales, viéndose rodeados por el ejército, se rindieron. Al menos setenta y cuatro de ellos serían detenidos por orden de Pavía . Después de pacificar la región , Pavía dejó el 8 de agosto Cádiz para dirigirse a Granada y Málaga. El 12 de agosto entrará en Granada sin hallar resistencia y tras desarmar a todos los insurrectos tanto en la capital como en la provincia el Cantón de Granada también quedaba sometido. Mas resistencia encontraría el general Martínez Campos en su avance hacia el Cantón de Valencia , que había sido proclamado el 18 de julio y se hallaba gobernado por una Junta Revolucionaria a la que cuatro días más tarde, el 22 de julio , se habían adherido ciento setenta y ocho localidades de la provincia de Valencia. . La Junta subrayó que aquello no se trataba de "hacer revolución social ni atentar contra los intereses económicos ni conculcar los sentimientos morales y religiosos, sino satisfacer las aspiraciones de la ciencia moderna de la civilización y del progresos. El movimiento acontecido no entraña deseo alguno de menoscabar la legalidad existente , antes al contrario, afianzarla más y más"
El 21 de julio salió de Valencia una fuerza de cien hombres que se dirigieron a Castellón para establecer el Cantón de Castellón , pero aquí no encontrarían el apoyo entusiasta de los pueblos de la provincia, donde el carlismo estaba muy enraizado. Apenas cinco días después de su fundación el Cantón de Castellón era controlado de nuevo por las fuerzas gubernamentales. El 24 de julio las primeras tropas del general Martínez Campo llegaban a las inmediaciones de Valencia, realizando un primer ataque que sería rechazado. Mientras los insurrectos levantan barricadas en las calles, y después de un fallido intento de negociación, el 2 de agosto Martínez Campos ordena que se inicie el bombardeo con artillería de la ciudad donde se extiende entre los ciudadanos el miedo y el desánimo a partes iguales. Después de tres días de bombardeos , el 5 de agosto una delegación internacional formada por los cónsules de Italia y de Reino Unido se entrevistaron con Martínez Campo para que hiciera un alto el fuego hasta las doce del mediodía del día siguiente. La Junta Revolucionaria redactaría un documento de rendición con una serie de condiciones , entre ellas la amnistía de los insurrectos, extremo que Martínez Campos rechazó porque él no tenía atribuciones para ello y les confirmó que sólo aceptaría una rendición sin condiciones. Rodeados y sin esperanzas de resistir, la Junta Revolucionaria decidió capitular aunque antes las cabezas más visibles de la insurrección embarcaron en el vapor "Matilde" atracado en el puerto para evitar ser detenidos. A continuación se izó la bandera blanca .Era el 8 de agosto de 1873 y el Cantón de Valencia dejaba de existir. Volvamos ahora al Cantón Murciano donde las autoridades de Cartagena habían estado a punto de declarar la guerra al Imperio Alemán después de la captura de el "Vigilante" por la fragata alemana Friedrich Karl. Lo cierto es que al ir avanzando en esta historia tengo la sensación de que una especie de locura colectiva se había extendido por muchas localidades , porque sólo eso explica que una ciudad como Cartagena sopesase declarar la guerra a una potencia europea. Las autoridades de Cartagena tenían decidido extender la sublevación a Almería y Málaga, y para ello el 28 de julio dejaban el puerto de Cartagena las fragatas Almansa y Vitoria cargadas de tropas . Cuando el 29 de julio se presentaron ante Almería exigieron una entrevista con las autoridades del Ayuntamiento y el gobierno civil exigiendo un pago en concepto de contribución de guerra y que las fuerzas gubernamentales en la ciudad la abandonaran para que los ciudadanos eligieran si querían formar el cantón o no.
Ante la negativa de las autoridades de la ciudad a plegarse a estas demandas el 30 de julio las fragatas del Cantón Murciano iniciaron el bombardeo de Almería respondido por las defensas de la ciudad, donde los civiles habían evacuado. Ante la resistencia de la ciudad , las fragatas decidieron dirigirse hacia Málaga con la intención de tratar de que se uniera a la causa cantonal, pero el 1 de agosto serán interceptadas de nuevo por una vieja conocida, la fragata alemana Friedrich Karl y la británica Swifsure, que capturaron a la Almansa y Vitoria.Las tripulaciones fueron desembarcadas en Escombreras, cerca de Cartagena mientras que las fragatas serían llevadas a Gibraltar donde más tarde serían devueltos a España. El 10 de agosto las fuerzas del general Martínez Campos que, como hemos visto, dos días antes habían ocupado Valencia , se enfrentaron a las tropas del Cantón Murciano en la Batalla de Chinchilla . Las tropas cantonales estaban dirigidas por dos nombres que ya conocemos, el general Juan Contreras y el gobernante del cantón , Antonio Gálvez , quienes pretendían cortar la comunicación con Madrid a través del tren. Pero las tropas cantonales fueron derrotadas y además de perder medio millar de hombres también perdieron abundante material militar, entre ellos cuatro cañones, doscientos cincuenta fusiles y cincuenta vagones dejando además abierto para las tropas gubernamentales el camino hacia Murcia que fue ocupada el 11 de agosto y su Junta Revolucionaria disuelta. El 14 de agosto una flota gubernamental trató de bloquear el puerto de Cartagena pero fue rechazada por las baterías que defendían el puerto. El 15 de agosto las tropas de Martínez Campos iniciaron el asedio por tierra de Cartagena, un asedio que se prolongaría hasta el 12 de enero de 1874. En estos momentos sólo quedaban dos cantones activos, el de Málaga y el Cantón Murciano en Cartagena. A pesar de ello Martínez Campos sabía que tomaría tiempo ocupar Cartagena y temía que en las Cortes la nueva Constitución federalista diera la victoria a los cantonales antes de que se rindieran. En una carta a Nicolás Salmerón expresaba precisamente sus temores a que "las Cotes voten la Constitución federal o cantonal que les dé el triunfo sin haber ellos arriado la bandera"
Entre tanto, Nicolás Salmerón tenía problemas con el general Pavía que pretendía acabar de una vez por todas con el Cantón de Málaga , pero Salmerón no le permitía ocupar la ciudad porque había llegado a un acuerdo con las autoridades cantonales malagueñas en virtud del cual reconocería un alto grado de independencia a la ciudad a cambio de que Málaga también reconociera la autoridad del gobierno. Frustrado, Pavía presentaría su dimisión hasta en dos ocasiones aunque Salmerón la rechazó las dos veces. Por otro lado el ejército presionaba al presidente para que fuera restaurada la pena de muerte y castigar con ella a los soldados insurrectos o que se rebelaran contra sus mandos. Salmerón ,que estaba en contra de la pena capital, trató de oponerse pero no pudo evitar que la propuesta fuera aprobada en las Cortes. El día 5 de septiembre le pusieron sobre la mesa para su firma el documento que incluía la aplicación de la pena de muerte a ocho soldados que en Barcelona habían abandonado sus destinos para unirse a las fuerzas carlistas. Negándose a firmar algo que iba en contra de su conciencia, el 6 de septiembre Nicolás Salmerón presentó su dimisión . En el debate que se produjo aquel día en las Cortes el anterior presidente , Pi y Margall, reprochó al gobierno la forma en que había sido sofocada la rebelión de los cantones "El gobierno ha vencido a los insurrectos - se dirigió a los diputados Margall - , pero ha sucedido lo que yo temía; han sido vencidos los republicanos. ¿Lo han sido los carlistas? No. Mientras ganabais vitalidad en el sur, los carlistas la ganaban en el norte. Yo no hubiese apelado a vuestros medios , declarando piratas a los buques de que se apoderaron los federales; yo no hubiese permitido que naciones extranjeras que ni siquiera nos han reconocido, viniesen a intervenir en nuestras tristísimas discordias . Yo no hubiese bombardeado Valencia. Yo os digo que , por el camino que seguís, es imposible que podáis hacer frente a los carlistas" Al día siguiente, el 7 de septiembre, era elegido como tercer presidente de la República Emilio Castelar , que recordemos que era representante del ala más moderada de los republicanos.
Decidido a garantizar la unidad del Estado y a poner final al caos en el que se encontraba sumido el 9 de septiembre Castelar solicitaría plenos poderes a las Cortes de la misma forma que lo había hecho Pi y Margall el 30 de junio , y también en esta ocasión le fueron concedidos con la diferencia de que mientras Margall lo solicitó sólo para ser aplicado en Vascongadas y Cataluña, Castelar lo aplicaría a toda España, tanto para acabar con la guerra carlista como con lo que quedaba de la rebelión cantonal. El 19 de septiembre las tropas del general Pavía hacían por fin su entrada en el cantón de Málaga por lo que ya sólo quedaba sin ser sometido el Cantón de Cartagena. El 20 de septiembre Castelar conseguía que se suspendieran las sesiones en las Cortes con el objetivo de detener la redacción de una Constitución federal . A partir de ese momento el presidente gobernaría a través de decretos, sin que sus decisiones tuvieran que pasar por la aprobación de las Cortes . Al asumir la presidencia Castelar había anunciado que "para sostener esta forma de gobierno necesito mucha infantería, mucha caballería, mucha artillería , mucha Guardia Civil y muchos carabineros" y a ello se puso realizando nuevas levas y llamando a los reservistas hasta poner en pie un ejército de 200.000 hombres. Restableció las Ordenanzas Militares que permitieron la aplicación de las penas de muerte que Salmerón no había querido firmar y que causaron su dimisión.Estas decisiones le ganaron el apoyo de los republicanos moderados y el rechazo de los federalistas y del sector más intransigente que lo consideraba una traición al federalismo y al movimiento cantonal, pero Castelar había quedado muy impresionado por lo sucedido aquel verano y no quería que se repitiera porque estaba en juego la unidad de España . Como escribiría más tarde el propio Castelar "Hubo días de aquel verano en que creíamos completamente disuelta nuestra España. La idea de la legalidad se había perdido en tales términos que un empleado cualquiera de guerra asumía todos los poderes y lo notificaba a las Cortes, y los encargados de dar y cumplir las leyes las desacataban sublevándose o tañendo a rebato contra la legalidad. No se trataba allí, como en otras ocasiones, de sustituir un ministerio , ni una forma de Gobierno; tratábase de dividir en mil porciones nuestra patria, semejantes a las que siguieron a la caída del califato de Córdoba."
Castelar describe en unas líneas el sinsentido que se extendió en aquellos meses por España explicándonos como "de provincias llegaban las ideas más extrañas y los principios más descabellados.Unos decían que iban a resucitar la antigua Corona de Aragón, como si las fórmulas del derecho moderno fueran conjuros de la Edad Media. Otros decían que iban a constituir una Galicia independiente bajo el protectorado de Inglaterra Jaén se apercibía a una guerra con Granada , Salamanca temblaba por la clausura de su gloriosa Universidad y el eclipse de su predominio científico. La sublevación vino contra el más federal de todos los ministerios posibles, y en el mismo momento en que la Asamblea trazaba de prisa un proyecto de Constitución , cuyos mayores defectos provenían de la falta de tiempo en la comisión y de la sobra de impaciencia en el gobierno" Por eso Salmerón decidió detener el proceso de redacción de la Constitución, pues no era posible redactar un texto de tal importancia bajo aquellas terribles presiones. Entre tanto, a partir del 9 de octubre la flota gubernamental inició el bloqueo del puerto de Cartagena que trató de ser levantado por la flota cantonal dos días después en la que sería conocida como batalla de Portman que terminó sin un vencedor claro, pero en todo caso los cantonalistas no lograron romper el bloqueo del puerto. Entre los meses de noviembre y diciembre la ciudad fue sometida a un intenso bombardeo. En los primeros días de enero la situación de Cartagena era ya desesperada mientras Castelar tampoco disfrutaba de unos días plácidos en Madrid debido a las constantes críticas que recibía , sobre todo después del nombramiento de varios generales contrarios a la República y de la apertura de conversaciones con el Vaticano lo que consideraba la ruptura de la separación entre Iglesia y Estado. Agotado por tantos obstáculos, Castelar anunció que "Puesto que soy un dictador estéril , yo os pido, ya que tratáis de sustituirme , que me sustituyáis pronto ,porque si algo me apena es el poder, y si algo me halaga es el retiro" El día 2 de enero de 1874 Salmerón se dirigió a las Cortes, que había reanudado su actividad, para proponer una República "ajustada a la flexibilidad de las circunstancias , transigente con las creencias y costumbres que encuentre a su alrededor, sensata para no alarmar a ninguna clase, fuerte para intentar todas las reformas necesarias, garantía de los intereses legítimos." Y concluía "No hemos salido de la tiranía de los reyes para entrar en la tiranía de los partidos"
Salmerón, Estanislao Figueras y Pi y Margall, los tres que habían sido presidentes de la República, presentaron aquel primer día de reanudación de las Cortes una moción de censura contra Castelar. El presidente sabía desde hacía varias semanas que se estaba preparando un golpe de estado en el caso de que él perdiera la moción de censura y se reune con el general Pavía para tratar de convencerlo de que se mantenga fiel a la legalidad y no se una a los golpistas, pero no logra un compromiso por parte del general aunque lo mantiene en su cargo. La moción de censura contra Castelar se votó en la madrugada del 3 de enero y Castelar fue derrotado por 120 votos a 100. Castelar presenta la dimisión y se propone como nuevo presidente al político valenciano Eduardo Palanca Asensi (1834-1900) . Pavía , que ya había tenido noticia de la derrota de Castelar,envía un escueto mensaje a Nicolás Salmerón donde dice "Desalojen la sala". El golpe de estado estaba en marcha. Salmerón informa a los diputados lo que estaba sucediendo, pero antes de que puedan reaccionar ya estaban entrando en las Cortes la Guardia Civil disparando al aire . Tomado el control de las Cortes, el general Pavía envía un telegrama a los jefes militares de toda España donde les comunica que "El ministerio de Castelar iba a ser sustituido por los que basan su política en la desorganización del ejército y en la destrucción de la patria. En nombre, pues, de la salvación del ejército, de la libertad y de la patria he ocupado el Congreso convocando a los representantes de todos los partidos, exceptuando los cantonales y los carlistas para que formen un gobierno nacional que salve tan caros objetivos" Pavía trató de convencer ahora a Castelar de que se pusiera de nuevo al frente del gobierno pero éste rehusó al considerar que el régimen que Pavía quería establecer era contrario a la democracia. Finalmente se designó al general Francisco Serrano y Domínguez (1810-1885), que ya había sido regente de España entre 1869 y 1871, como nuevo presidente de la República, pero en realidad la I República nacida el 11 de febrero de 1873 había dejado de existir. Nueve días después, el 12 de enero de 1874, Cartagena capitulaba terminando así la Revolución de los Cantones. Al final de 1874, el 29 de diciembre, el general Arsenio Martínez Campos daba un golpe de Estado con el fin de restablecer la monarquía en la persona del príncipe Alfonso de Borbón(1857-1885), el hijo de Isabel II. En enero de 1875 Alfonso regresaba a España y sería proclamado Rey por las Cortes tomando el nombre de Alfonso XII. En 1876 terminaría la Tercera Guerra Carlista con la derrota de los carlistas. Muchas duras pruebas le quedaban a España por delante .La I República resultó un experimento fallido que pudo abrir el camino para una modernización de España, pero el caos en que la sumió la revolución cantonal acabó con las esperanzas depositadas en ella.
Enlace con la primera parte de La revolución de los cantones
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Enlace con la segunda parte de La revolución de los cantones
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Retrato del político , escritor e historiador español nacido en Barcelona, Francisco Pi y Margall (1824-1901) realizado por el pintor José Sánchez Pescador (1839-1887) que el 11 de junio se convertía en el segundo presidente de la Primera República. Era miembro del Partido Republicano Democrático Federal . Sería el gran impulsor del Proyecto de la Constitución Federal de 1873 que, sin embargo, nunca llegaría a terminar de redactarse por todos los acontecimientos que se sucedieron a lo largo de este año. Recordemos que esta Constitución establecía que "La forma de gobierno de la Nación española es la República Federal" Y había establecido un total de diecisiete estados federados. Pero además Pi y Margall tenía un amplio programa de reformas como la separación entre la Iglesia y el Estado, la enseñanza obligatoria y gratuita, la reducción de la jornada de trabajo, la limitación del trabajo infantil o la abolición de la esclavitud(seguía vigente en Cuba y Puerto Rico) entre otras medidas medidas modernizadoras que no podría llevar a cabo pues su gobierno duró apenas un mes y siete días siendo arrastrado por el curso de los acontecimientos, en particular por la Revolución Cantonal (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
En junio habían comenzando las reuniones para la redacción de la nueva Constitución y vimos como el 8 de junio se votaba su primer artículo donde se proclamaba que "la forma de gobierno de la Nación española es la República democrática federal" , una república federal que estaría integrada por diecisiete estados . Pero esto no era suficiente para los intransigentes que consideraban que cualquier provincia , ciudad e incluso municipios de menor tamaño podían constituir sus propios estados o cantones. Después de conocer que varios miembros de la corriente intransigente estaban preparando un golpe de estado , y ante el clima de tensión e inestabilidad que se extendía por toda España, Estanislao Figueras presentaba su dimisión el 9 de junio y abandonaba España rumbo a Francia. Le reemplazó Francisco Pi y Margall, convirtiéndose el 11 de junio de 1873 en el segundo presidente de la República. Nada más asumir el cargo Margall observa como se le acumulan los problemas entre la rebeldía de los intransigentes y el desarrollo de la tercera guerra carlista. Pi y Margall pidió poderes especiales a las Cortes para hacer frente a tantos desafíos y le fueron concedidos el 30 de junio entre las protestas de los intransigentes que consideraban que esos poderes especiales eran un atentado contra la democracia y un recorte de los derechos individuales, aunque los poderes especiales que había recibido Margall se limitaban a los dos escenarios de mayor inestabilidad por la guerra carlista, Cataluña y las Vascongadas. El día 1 de julio los diputados de la corriente intransigente del republicanismo abandonaban las Cortes y aunque le echaban al presidente de la República en cara la solicitud de esos poderes especiales, lo que en realidad criticaban es que Margall no hubiera prescindido de las Cortes y de la redacción de una Constitución para dar rienda suelta a que la República Federal hubiera sido construida de forma espontánea por los ciudadanos, constituyendo por sí solos sus propios estados.El día 2 de julio el único diputado de la corriente intransigente que había permanecido en las cortes, José Navarrete, le echaba en cara a Margall los argumentos que os acabo de exponer a lo que Margall replicaría con estas palabras.
Uno de los retos a los que se enfrentaba la República era la guerra carlista que heredaba del reinado de Amadeo I de Saboya. Recordemos que los orígenes de estas guerras internas se remontaba a la muerte de Fernando VII(1784-1833) quien había designado como heredera a su hija mayor Isabel II(1830-1904) a lo que se opuso el hermano de Fernando VII, Carlos María Isidro de Borbón /1788-1855) que se autoproclamó rey con el nombre de Carlos V dando comienzo a la primera guerra carlista. En 1872 era su nieto, Carlos María de Borbón (1848-1909) quien pretendía el trono con el nombre de Carlos VII y dirigía a sus partidarios en la que sería conocida como la Tercera Guerra Carlista . En el mapa podéis ver los principales escenarios donde se desarrolló la guerra destacando sobre todo Navarra, País Vasco , Cataluña. La República no vería el final de este conflicto que además se vería agravado por el estallido de la revolución cantonal en julio de 1873 como veremos un poco más adelante (Imagen procedente de https://es.slideshare.net/artesonado/la-oposicin-al-sistema-liberal-el-carlismo ) |
"Lo que pretende el Sr Navarrete y sus epígonos es que el Gobierno debería haber sido un gobierno revolucionario que debería haberse arrogado una cierta dictadura, dejando de contar con las Cortes Constituyentes " Y continúa Margall "Si la república hubiese venido de abajo a arriba (como ya sabemos esto quiere decir que se formaran los estados federales antes de que estuviera redactada la Constitución y sin ningún marco legal que estableciera los límites para su desarrollo) , las provincias habrían empezado por constituirse en cantones y hubiese desaparecido el poder central. Entiendo que habríamos llegado, mas o menos tarde, a reconstituir la unidad nacional estableciendo una República como todos deseamos; pero habríamos atravesado un período largo, trabajoso y muy propicio a conflictos y perturbaciones; mientras que ahora, por medio de las Cortes Constituyentes, conviniendo todos en que ellas deben definir la forma de gobierno, hemos salvado grandes escollos y traído la República Federal sin grandes perturbaciones , sin estrépito, sin sangre" Y añadía "No se realizan los deseos de los pueblos promoviendo insurrecciones, que son siempre una calamidad para las sociedades, se logran los deseos de los pueblos propagando las ideas, llevándolas a comicios cuando los comicios se abran, explicándolas después con fuerza y con ímpetu en las Cortes cuando las Cortes estén abiertas , y no retrayéndose como se retrajo la minoría ayer(se refería a la marcha de los diputados de la corriente intransigente) Influya el señor Navarrete para que ese retraimiento sea pasajero y para que pronto vemos a todos los diputados en los bancos" Pero a pesar de las palabras de Margall la República no había salvado los peores escollos , porque los diputados intransigentes que habían abandonado las Cortes estaban decididos a alentar la formación de los cantones sin esperar a que las Cortes terminaran la redacción de la Constitución . Durante las siguientes semanas en diferentes ciudades de España el poder iba a ser asumido por juntas revolucionarias , sobre todo en localidades de Valencia, Murcia y Andalucía.
Esta es una caricatura publicada el 28 de marzo en la revista satírica "La Flaca: revista liberal y anticarlista" realizada por el ilustrador español Tomás Padró (1840-1877) donde muestra como la recién nacida República es saludada por otras repúblicas como Estados Unidos, Suiza y Francia mientras que es rechazada por las monarquías y los Imperios como Rusia, Alemania. Entre los que saludaban con entusiasmo a la República estaba el movimiento obrero representado por la Federación Regional Española de la Asociación Internacional de Trabajadores (FRE-AIT), creado en 1870 y que en la convocatoria de un mitin celebrado en Barcelona el 13 de febrero de 1873, dos días después de la proclamación de la República, valoraba sobre el nuevo régimen político que "Parece que se abre un período revolucionario en el cual, si las clases obreras sabemos ponernos a la altura de los acontecimientos , podremos alcanzar algo o mucho de lo que tan necesario es para que mejoremos nuestra precaria situación. Queremos el establecimiento de la enseñanza obligatoria en todo el grado posible, la instrucción , tan necesaria para el obrero. Queremos que rijan en los talleres y fábricas condiciones higiénicas , que la salud del obrero así lo exige. Queremos, en fin, evitar en lo posible el triste espectáculo de ver a los niños perder su salud en trabajos impropios de su edad. ¡Armas al pueblo trabajador!¡Autonomía del Municipio!¡Menos horas de trabajo y más salario!Salud y emancipación social" El problema para la recién nacida República es que todos la exigían cambios muy rápidos y nadie tenía paciencia para esperar el tiempo necesario para que se pudieran desarrollar lo que al final la arrastraría al caos (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
Pero la revolución cantonal iba a tener un prólogo cuyo origen no era la independencia de una ciudad sino una protesta de los trabajadores. El 7 de julio se inicia una huelga general en Alcoy , en la provincia de Alicante. Era entonces una ciudad de treinta mil habitantes y una de las más industrializadas de España pues cerca de un tercio de su población , alrededor de unas diez mil personas, trabajaba en las industrias papelera y textil asentadas en la localidad, aunque las condiciones eran muy duras , con jornadas de trabajo que superaban las doce horas y sueldos bajos, además de la falta de seguridad en el puesto de trabajo motivo de muchos accidentes. Después de que el 8 de junio se hubiera proclamado la República Federal, como ya hemos visto, la Federación Regional Española de la Asociación Internacional de Trabajadores (FRE-AIT), creada en 1870, consideró que era el momento de llevar a cabo una revolución social. El 7 de julio la comisión de la FRE-AIT reunió a los trabajadores de Alcoy en la plaza de toros de la ciudad para convocarles a la huelga general con el objetivo de exigir un aumento salarial del 20% y una reducción de la jornada laboral de doce a ocho horas. El 9 de julio los empresarios rechazaron las exigencias de los trabajadores y contaron con el apoyo del alcalde de Alcoy, Agustí Albors (1822-1873) del Partido Republicano Federal. Los miembros del comité del FRE-AIT exigieron la dimisión del alcalde y su sustitución por una junta revolucionaria. Hubo una entrevista entre Albors y los líderes del comité del FRE-AIT, pero mientras tenía lugar en el ayuntamiento esta reunión en el exterior hubo un enfrentamiento entre la multitud congregada ante el ayuntamiento y la policía municipal que terminó disparando para que se disolvieran causando varios heridos y un muerto. La mecha de la revolución prendió , los trabajadores tomaron las armas y se adueñaron de las calles , secuestraron a decenas de empresarios y prendieron fuego a algunas fábricas mientras que el alcalde junto a treinta y dos policías trató de hacerse fuerte en el ayuntamiento , esperando la llegada de los refuerzos que había solicitado al Gobierno en Madrid . Sin embargo no daría tiempo a que estos refuerzos llegaran, porque el 10 de julio el ayuntamiento fue incendiado y el alcalde y siete policías fueron asesinados muriendo en la refriega un total de quince personas, de las que sólo dos pertenecían a los insurrectos
"Muerte del alcalde de Alcoy, D. Agustí Albors" , una ilustración del pintor Juan Alaminos incluida dentro de la obra " Historia contemporánea : segunda parte de la Guerra Civil: anales desde 1843 hasta el fallecimiento de Alfonso XII" Recoge el momento en que el alcalde de Alcoy , Agustí Albors era asesinado el 10 de julio de 1873 a manos de los trabajadores que se habían sublevado para exigir mejores condiciones laborales. Después de que sus propuestas fueran rechazadas por los fabricantes había estallado la revuelta y el alcalde junto con treinta y dos guardias se había refugiado en el ayuntamiento donde fue asediado hasta que los sublevados prendieron fuero al edificio forzando su salida. Murió el alcalde y otras quince personas en lo que sería conocida como la Revolución del Petróleo . Ya el 2 de marzo una reunión del comité local de la organización obrera FRE-AIT anunciaba el posible uso de la violencia para alcanzar sus objetivos . Manifestaban posturas radicales que más que un apoyo a la República hablaban de la destrucción de las instituciones y de una revolución . En el acta de la reunión de la Comisión Federal del 2 de marzo de 1873 se podía leer que la Asociación Internacional de Trabajadores era " La única que puede prestar la fuerza suficiente para destruir cuando se crea oportuno todas las instituciones y los privilegios de la presente sociedad burguesa, y la organización revolucionaria del proletariado fuera de toda organización autoritaria dirigida por los burgueses , o lo que es lo mismo, el armamento de los trabajadores sin pertenecer a las milicias burguesas, a fin de estar dispuestos a lo que pudiera suceder" (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Los insurrectos establecieron un Comité de Salud Pública que gobernó Alcoy durante tres días hasta que el 13 de julio hicieron su entrada las tropas del gobierno asumiendo el control de inmediato y deteniendo a más de medio millar de obreros que en los años siguientes fueron paulatinamente amnistiados hasta ser liberados todos ellos. Sin embargo, aunque la huelga general de Alcoy , que luego sería conocida conocida como la Revolución del Petróleo, no forma parte de la Revolución Cantonal, si refleja la tensión que se respiraba en muchos lugares . En Madrid los intransigentes habían creado un Comité de Salud Pública dirigido por el filósofo y político Roque Barcia Martí (1821-1885) cuyo objetivo era dirigir la insurrección de los cantones. Aunque en un primer momento pretendieron llevarlo a cabo en Madrid no se daban las condiciones adecuadas para ello así que fijaron un nuevo objetivo, la ciudad de Cartagena, en la provincia de Murcia, y uno de los puertos más importantes de la Península. Así, en la madrugada del 12 de julio de 1873 , los insurrectos dirigidos entre otros por el político y médico Manuel Cárceles Sabater (1850-1933) asaltaron y ocuparon el ayuntamiento de Cartagena estableciendo la Junta Revolucionaria de Salvación Pública exigiendo que se proclamarse la creación del Cantón Murciano. El alcalde de Cartagena informó aquella mañana al Gobierno en Madrid de esta exigencia y la respuesta que llegó vino de mano del gobernador civil de Murcia, Antonio Altadill (1828-1880) que envió un telegrama al alcalde de Cartagena donde le conminaba a que "diga usted a la Junta en nombre mío y del Gobierno , que la Comisión de las Cortes tiene acordado el Cantón murciano; en breve será un hecho este acuerdo" y le animaba a que "Resista hasta donde pueda la dimisión del ayuntamiento" y le rogaba que "evite apelar a las armas y el derramamiento de sangre" Cuando por fin llegó a Cartagena Altadill lo haría acompañado por el diputado federal murciano Antonio Gálvez Arce (1819-1898) Comprobaron que los insurrectos liderados por Cárceles Sabater controlaban los principales edificios de la ciudad y también sus fortalezas, aunque no habían podido apoderarse de los buques militares atracados en el puerto.
Una nueva caricatura del ilustrador español Tomás Padró (1840-1877) para la revista satírica "La Flaca: revista liberal y anticarlista" donde vemos sentado en el centro al presidente Pi y Margall sosteniendo con aspecto agobiado un papel que pone "Crisis nacional" . Es un maestro desbordado por los revoltosos alumnos que asisten a la "Escuela Nacional -Federal de Párvulos para el uso del País" . En una pizarra a la derecha un niño con una camisa que pone Justicia Federal, escribe "Nos oponemos a todos". A la izquierda un grupo de niños vestidos con trajes regiones que representan a los cantones sublevados, tratan de aprender el sentido de palabras como "orden, sensatez, patriotismo y unión"Sobre la mesa vemos otros papeles que ponen disciplina militar o carlistas. Una representación de todos los problemas que rodeaban al gobierno de Pi y Margall que apenas treinta y siete días después de asumir la presidencia el 11 de junio de 1873 , tuvo que presentar la dimisión el 18 de julio en plena revolución cantonal (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Arce recomendó que el ayuntamiento presentara su dimisión y así se hizo con la aprobación del gobernador civil, Altadill, lo que dejaba despejado el camino para la formación del Cantón Murciano, al que también se da en ocasiones el nombre de Cantón de Cartagena. De esta forma , la tarde del 12 de julio de 1873 se procedía a la proclamación formal del Cantón Murciano con esta declaración "Proclamada como forma de gobierno para España la República Federal, el pueblo republicano, en su inmensa mayoría reclamaba, como imperiosamente exigían las circunstancia, que se organizase la Federación estableciendo inmediatamente la división regional de los cantones y dando a estos y al municipio la autonomía suspirada hace tanto tiempo. " Pero la impaciencia por alcanzar estos objetivos había precipitado los acontecimientos acusando al Gobierno de inmovilista "Pero el pueblo, ansiosísimo de estas reformas, sediento de esta redención tan deseada , veía prolongarse indefinidamente sus momentos de agonía, veía amenazada la República de un golpe de muerte y no veía, ni en el gobierno ni en la Cámara Constituyente una predisposición para la inmediata ejecución de estas reformas y cree que sin ellas se perdería indudablemente para muchísimos años la libertad en esta tierra de España" y por ello "Era llegada la hora de salvar, de constituir definitivamente la República Federal y que no hacer esto sería tanto como cometer una indignidad que no podemos suponer en ningún pecho republicano donde se albergue y lata un corazón de hombre " Es decir , según esta proclama se trataba de salvar la República de lo que ellos consideraban que era un final cercano y eso justificaba que "el pueblo se haya puesto en armas, porque ha creído ver en inminente riesgo la santa causa de la República Federal." y concluía "Aquí no hay verdugos ni víctimas, opresores ni oprimidos , sino hermanos prontos a sacrificarse por la libertad y la felicidad de sus conciudadanos. ¡Viva la República Federal!¡Viva la soberanía del pueblo" Al frente del recién proclamado Cantón Murciano fue puesto el propio Antonio Gálvez Arce y dos días después los buques de guerra atracados en el puerto de Cartagena izaron la enseña roja del Cantón. Entre ellas estaban las fragatas blindadas Numancia, Vitoria, Tetúan y Méndez Núñez, la fragata de hélice Almansa, el vapor de ruedas Fernando el Católico y la corbeta Ferrolana.
Grabado publicado en la revista "La Ilustración Española y Americana" realizado por el pintor José Luís Pellicer (1842-1901) con el título de "Cartagena, los soldados de Iberia y la marinería de los buques de guerra fraternizan con los sublevados" reflejando la situación en Cartagena en julio de 1873 cuando se produjo la proclamación del llamado Cantó Murciano. El 14 de julio los buques de la Armada Española atracados en el puerto de Cartagena izaron el pabellón rojo que adoptó el Cantón como bandera a pesar de que el día antes el ministro de la Marina Federico Anrich y Sanmartín subió a bordo de las fragatas Vitoria y Almansa para tratar de convencerlos de que no lo hicieran , pero no estaba en el ánimo de las tripulaciones escuchar sus argumentos y tuvo que marcharse . La flota quedaría en manos de las autoridades del Cantón que la utilizarían tanto para tratar de extender la sublevación como para exigir el pago de ayudas para mantener la rebelión en Cartagena. Llegarían incluso a bombardear Almería el 30 de julio cuando las autoridades almerienses se negaron a unirse a la rebelión cantonal (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Al frente de las tropas del Cantón Murciano se puso el general Juan Contreras y San Román (1807-1881) que había sido capitán general de Cataluña entre febrero y marzo de ese año y había destacado como uno de los líderes de los intransigentes. El 15 de julio el general Contreras hacía público un manifiesto en el que pedía al ejército del Gobierno de Pi y Margall que no abrieran fuego "ni contra el pueblo ni contra sus hermanos de armas" y prometía que "No envainaré mi espada hasta que el pueblo tenga su soñada federación, Nuestra conducta será ayudar a los pueblos que deben ser libres"La proclamación de la independencia del Cantón Murciano fue la señal para que en los días siguientes se sucedieran las proclamaciones de nuevos cantones por toda España. El 17 de julio se proclamaba el Cantón de Valencia, el 19 de julio los cantones de Sevilla, Tarifa, Torrevieja, Cádiz y Almansa, el 20 de julio les llegó el turno a los cantones de Alicante y Granada, el 21 de julio se crearon los cantones de Málaga y Castellón, el 22 de julio lo harían los de Algeciras, Andújar, Bailén, Béjar y Motril, el 23 de julio Córdoba y Gualchos, y el 24 de julio Salamanca . Son sólo algunas de las ciudades y localidades que en aquellos días se unieron a la revolución de los cantones.Las Juntas que se formaban para el gobierno de los cantones coincidían en tomar una serie de decisiones como la adopción de medidas beneficiosas para los trabajadores, la eliminación de impuestos sobre el consumo de productos populares como los que había sobre el tabaco y la sal, la expropiación de los bienes de la Iglesia , la sustitución del ejército gubernamental por milicias populares y la concesión del indulto a los presos políticos. Incapaz de detener la rebelión cantonal el gobierno de Pi y Margall perdió el apoyo de las Cortes el 17 de julio y un día después el presidente presentaba su dimisión ."Entiendo yo - diría Pi y Margall - que dada la grave situación del país y los grandes peligros que amenazan a la República y a la Patria sólo será posible un ministerio en que aunadas en un sentimiento común todas las fracciones de la Cámara , pudiese hacer frente a las necesidades de la guerra y contener el movimiento de disgregación que ha empezado en algunas provincias". El segundo gobierno de la República había durado apenas treinta y siete días.
En este mapa podéis ver en color rojo las áreas donde se estaba disputando la Tercera Guerra Carlista desde 1872. Las llamas representan las localidades donde se produjeron hechos relacionados con la revolución de los cantones que , como podéis observar, se centraba sobre todo en Andalucía, Murcia y la actual Comunidad Valenciana (Alicante, Valencia y Castell´n) si bien también había algunos brotes en Castilla y Extremadura. En la costa tenemos trazada con una fecha rosa las expediciones de la armada del Cantón Murciano tanto a Almería, que como os decía antes fue bombardeada el 30 de julio , como las que condujeron a estos barcos a Alicante, donde crearon un cantón el 20 de julio que apenas sobrevivió durante tres días. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
El mismo día de la dimisión de Pi y Margall sería elegido por las Cortes como tercer presidente de la República el filósofo, abogado y político Nicolás Salmerón (1838-1908) que ya había sido ministro de Gracia (Justicia) durante el gobierno de Estanislao Figueras, donde promovió la abolición de la pena muerte y la separación del poder judicial del ejecutivo. Pero era un republicano moderado por lo que su elección lejos de calmar a los insurrectos animó la rebelión porque muchos pensaban que bajo el gobierno de Salmerón sería imposible la formación de una República Federal. Lo cierto es que el nuevo presidente tenía que enfrentarse a una situación crítica. Continuaban las guerras en Cuba contra los independentistas y la guerra contra los carlistas a lo que había que sumar los cantones sublevados , por lo que a finales de aquel mes de julio había entre carlistas y los rebeldes de los cantones treinta y dos provincias sublevadas . Por cierto, es posible que os resulte curioso que no haya nombrado a Cataluña, pero en ella el movimiento cantonal no tuvo fuerza porque era uno de los escenarios en el que se desarrollaba la guerra contra los carlistas. Salmerón decidió adoptar una política de mayor dureza que su predecesor, comenzando por destituir a todos los cargos que de una u otra forma habían ayudado o mostrado sus simpatías por la rebelión cantonal, desde gobernadores civiles a alcaldes y también a los miembros del ejército al tiempo que se hizo rodear de generales que eran contrarios a la República Federal pero en los que podía confiar para sofocar la rebelión, entre ellos los generales Manuel Pavía (1827-1895) y Arsenio Martínez Campos (1831-1900). A Martínez Campos el presidente Salmerón le ordenó someter a los rebeldes de los cantones de Valencia y Almansa mientas que Pavía se dirigió a Andalucía para sofocar la rebelión los cantones de esa región . Entre tanto, el 18 de julio el vapor Fernando el Católico zarpaba del puerto de Cartagena para llevar refuerzos a a los insurrectos en las poblaciones de Mazarrón y Águilas (ambas en la provincia de Murcia) y animarles a unirse al Cantó Murciano. El 20 de julio la fragata Vitoria también dejaba el puerto de Cartagena rumbo a Alicante llevando a quinientos hombres con el objetivo de extender la rebelión y proclamar el Cantón de Alicante.
Retrato del tercer presidente de la República, Nicolás Salmerón (1838-1908) , sucesor de Pi y Margall, realizado en 1879 por el pintor español Federico de Madrazo (1815-1894). Era partidario de la República Federal pero a través de un proceso más lento y llegando a consenso con el resto de formaciones políticas . Un ritmo demasiado lento para los republicanos federales del ala intransigente que creían que con tanta prudencia nunca se llegaría a constituir la República Federal por lo que nada más asumir la presidencia el 18 de julio la rebelión cantonal se intensificó y Salmerón tuvo que adoptar medidas más duras para reconducir una situación que amenazaba con desgarrar a España (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Durante el trayecto la Almansa apresaría a tres barcos. Estas primeras misiones fueron un un éxito porque Mazarrón y Águilas se unieron al cantón Murciano y en Alicante se estableció también un cantón, pero en esta última apenas tres días después el gobierno recuperaba el control . Después de la acción de la fragata Almansa Nicolás Salmerón publicó el 21 de julio de 1873 un decreto por el cual los barcos de guerra que habían quedado en manos del Cantón de Cartagena fueron declarados piratas . En el artículo 1 de aquel decreto se establecía que "Las tripulaciones de las fragatas de la Armada Nacional "Almansa", "Vitoria" y Méndez Núñez", del vapor "Fernando el Católico" y la de cualquier otro buque de guerra de los sublevados en el Departamento de Cartagena , serán considerados como piratas al encontrársele en los mares juridisccionales de España o fuera de ellos, por fuerzas navales o extranjeras con arreglo a los artículos 4º,5º y 6º de las Ordenanzas Generales de la Armada" y en el Artículo 2 del decreto anunciaba que "Los comandantes de los buques de guerra de las potencias amigas de España, quedan autorizados para detener a los buques mencionados en el artículo 1º, y juzgar a los individuos que los tripulen en el concepto que el mismo expresa; reservándose el Gobierno español la propiedad de los buques , previas las correspondientes reclamaciones por vía diplomática" Esto significaba que cualquier navío tanto español como extranjero estaba autorizado a interceptar los navíos bajo el mando del Cantón Murciano. La Junta del Cantón Murciano enviaba expediciones por mar y tierra para tratar de extender la rebelión cantonal pero también para obtener provisiones y dinero para mantener a los nueve mil hombres que se hallaban en Cartagena. Tras la declaración de piratería publicada el 21 de julio al día siguiente las autoridades del Cantón respondieron declarando a los miembros del Gobierno en Madrid "traidores a la patria y a la República Federal" Pero la declaración de piratería no tardaría en surtir efecto El 23 de julio uno de los barcos que los insurrectos del cantón Murciano habían capturado y que ahora se hallaba en su poder, el Vigilante, fue interceptado y capturado por la fragata alemana Friedrich Karl y tras liberar a su tripulación llevaría el barco hasta Gibraltar, colonia inglesa, desde donde sería devuelto al gobierno español.
Fotografía del general Manuel Pavía (1827-1895) que había tomado parte en 1866 en la sublevación de Villarejo de Salvanés dirigida por el general Juan Prim (1814-1870) contra la reina Isabel II que terminó fracasando e hizo que Pavía marchara al exilio , regresando después de la Revolución de 1868, la Gloriosa, que causó la caída de la reina que marcharía al exilio. Combatió en Navarra al inicio de la Tercera Guerra Carlista hasta que Nicolás Salmerón le encargó sofocar la rebelión de los cantones en Andalucía . Mientras, desde Madrid, el Comité de Salud Pública creado por los partidarios de la rebelión cantonal ordenaba que "En todos los puntos en donde el partido federal tenga la fuerza necesaria (no era el caso de Madrid y por eso no pudieron proclamar el cantón independiente en la capital) , se formen Comités de Salud Pública representantes de la imprescindible soberanía del pueblo. Que bajo la autoridad de estos comités revolucionarios se proclame la autonomía administrativa y económica del Municipio, de la provincia y del Cantón, al cual corresponde la elección de los jueces, ayuntamientos, diputaciones o legislaturas, gobernadores, grandes asambleas cantones y agentes económicos y administrativos. Que esos comités no se disolverán hasta quince días después de haber promulgado el pacto federal , para evitar que el pueblo sea engañado , como ha sucedido hasta aquí" (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
Pero dejemos de nuevo Cartagena para regresar junto al general Pavía que el 21 de julio dejaba Madrid para emprender su avance hacia el sur para sofocar la revolución cantonal en Andalucía. A su llegada a Córdoba la rebelión cantonal en la ciudad ya había sido conjurada así que su siguiente objetivo fue el Cantón de Sevilla . Dejó Córdoba el 26 de julio . Dos días más tarde comenzaban los combates contra los insurrectos sevillanos librando duros combates que se prolongarán hasta el 30 de julio , cuando las fuerzas de Pavía entran en el ayuntamiento sevillano y el 31 de julio completan el control de la ciudad. Se estima que las bajas de Pavía fueron unos trescientos hombres pero ignoramos el número de víctimas entre los defensores del cantón ya que nadie las contó. El 1 de agosto Pavía entraba victorioso en la Sevilla , mientas que sus tropas recorrían toda la provincia para sofocar cualquier intento de rebelión. Al día siguiente, 2 de agosto, Pavía abandonaba Sevilla para continuar su avance hacia el sur. El 3 de agosto los cantonales son expulsados de Jerez de la Frontera y Pavía se planta ese mismo día ante las puertas de Cádiz, donde se había proclamado el Cantón el 19 de julio. Las autoridades cantonales, viéndose rodeados por el ejército, se rindieron. Al menos setenta y cuatro de ellos serían detenidos por orden de Pavía . Después de pacificar la región , Pavía dejó el 8 de agosto Cádiz para dirigirse a Granada y Málaga. El 12 de agosto entrará en Granada sin hallar resistencia y tras desarmar a todos los insurrectos tanto en la capital como en la provincia el Cantón de Granada también quedaba sometido. Mas resistencia encontraría el general Martínez Campos en su avance hacia el Cantón de Valencia , que había sido proclamado el 18 de julio y se hallaba gobernado por una Junta Revolucionaria a la que cuatro días más tarde, el 22 de julio , se habían adherido ciento setenta y ocho localidades de la provincia de Valencia. . La Junta subrayó que aquello no se trataba de "hacer revolución social ni atentar contra los intereses económicos ni conculcar los sentimientos morales y religiosos, sino satisfacer las aspiraciones de la ciencia moderna de la civilización y del progresos. El movimiento acontecido no entraña deseo alguno de menoscabar la legalidad existente , antes al contrario, afianzarla más y más"
Fotografía del general Arsenio Martínez Campos (1831-1900) tomada hacia 1878 cuando era gobernador de Cuba. Cinco años antes fue llamado por Nicolás Salmerón para que se hiciera cargo de la campaña para sofocar la rebelión de los cantones en Valencia y Murcia. Entre 1869 y 1872 había estado combatiendo en Cuba contra los independentistas cubanos y cuando regresó a España tomó parte en la Tercera Guerra Carlista en Cataluña hasta que asumió el encargo de Salmerón en julio y en apenas dos meses habría acabado con todos los cantones de Valencia y Murcia excepto con Cartagena a la que sometería a un largo asedio entre septiembre de 1873 y enero de 1874 hasta la capitulación de la ciudad el 12 de enero de 1874 con lo que se ponía punto final a la revolución de los cantones. Tiempo después, el 29 de diciembre de 1874, Martínez Campos sería el encargado de liderar el pronunciamiento militar que restauró la monarquía en España en la persona del rey Alfonso XII, hijo de Isabel II. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
El 21 de julio salió de Valencia una fuerza de cien hombres que se dirigieron a Castellón para establecer el Cantón de Castellón , pero aquí no encontrarían el apoyo entusiasta de los pueblos de la provincia, donde el carlismo estaba muy enraizado. Apenas cinco días después de su fundación el Cantón de Castellón era controlado de nuevo por las fuerzas gubernamentales. El 24 de julio las primeras tropas del general Martínez Campo llegaban a las inmediaciones de Valencia, realizando un primer ataque que sería rechazado. Mientras los insurrectos levantan barricadas en las calles, y después de un fallido intento de negociación, el 2 de agosto Martínez Campos ordena que se inicie el bombardeo con artillería de la ciudad donde se extiende entre los ciudadanos el miedo y el desánimo a partes iguales. Después de tres días de bombardeos , el 5 de agosto una delegación internacional formada por los cónsules de Italia y de Reino Unido se entrevistaron con Martínez Campo para que hiciera un alto el fuego hasta las doce del mediodía del día siguiente. La Junta Revolucionaria redactaría un documento de rendición con una serie de condiciones , entre ellas la amnistía de los insurrectos, extremo que Martínez Campos rechazó porque él no tenía atribuciones para ello y les confirmó que sólo aceptaría una rendición sin condiciones. Rodeados y sin esperanzas de resistir, la Junta Revolucionaria decidió capitular aunque antes las cabezas más visibles de la insurrección embarcaron en el vapor "Matilde" atracado en el puerto para evitar ser detenidos. A continuación se izó la bandera blanca .Era el 8 de agosto de 1873 y el Cantón de Valencia dejaba de existir. Volvamos ahora al Cantón Murciano donde las autoridades de Cartagena habían estado a punto de declarar la guerra al Imperio Alemán después de la captura de el "Vigilante" por la fragata alemana Friedrich Karl. Lo cierto es que al ir avanzando en esta historia tengo la sensación de que una especie de locura colectiva se había extendido por muchas localidades , porque sólo eso explica que una ciudad como Cartagena sopesase declarar la guerra a una potencia europea. Las autoridades de Cartagena tenían decidido extender la sublevación a Almería y Málaga, y para ello el 28 de julio dejaban el puerto de Cartagena las fragatas Almansa y Vitoria cargadas de tropas . Cuando el 29 de julio se presentaron ante Almería exigieron una entrevista con las autoridades del Ayuntamiento y el gobierno civil exigiendo un pago en concepto de contribución de guerra y que las fuerzas gubernamentales en la ciudad la abandonaran para que los ciudadanos eligieran si querían formar el cantón o no.
Grabado titulado "Embarque en el Matilde durante el asedio de Valencia" obra del ilustrador y pintor español Daniel Urrabieta Vierge (1851-1904) publicado en el mes de agosto de 1873 en la revista francesa "Le Monde ilustré". El Cantón de Valencia se había proclamado el 18 de julio . Apenas catorce días después, el 2 de agosto, las tropas de Martínez Campos bombardeaba la ciudad lo que fue minando la moral de la población y de sus defensores que capitularían el 8 de agosto . Antes de la capitulación se produjo la escena que recrea Vierge, cuando los dirigentes del levantamiento suben al Matilde que había sido requisado para poder huir Cuando el general Martínez Campos entró en la ciudad un comité le pidió que fuera clemente con los sublevados, a lo que el general replicó "Podré ser clemente con los delitos políticos, pero fusilaré al asesino porque, en mis ideas, no cabe la abolición de la pena de muerte, sin estar antes abolido el asesinato" (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Ante la negativa de las autoridades de la ciudad a plegarse a estas demandas el 30 de julio las fragatas del Cantón Murciano iniciaron el bombardeo de Almería respondido por las defensas de la ciudad, donde los civiles habían evacuado. Ante la resistencia de la ciudad , las fragatas decidieron dirigirse hacia Málaga con la intención de tratar de que se uniera a la causa cantonal, pero el 1 de agosto serán interceptadas de nuevo por una vieja conocida, la fragata alemana Friedrich Karl y la británica Swifsure, que capturaron a la Almansa y Vitoria.Las tripulaciones fueron desembarcadas en Escombreras, cerca de Cartagena mientras que las fragatas serían llevadas a Gibraltar donde más tarde serían devueltos a España. El 10 de agosto las fuerzas del general Martínez Campos que, como hemos visto, dos días antes habían ocupado Valencia , se enfrentaron a las tropas del Cantón Murciano en la Batalla de Chinchilla . Las tropas cantonales estaban dirigidas por dos nombres que ya conocemos, el general Juan Contreras y el gobernante del cantón , Antonio Gálvez , quienes pretendían cortar la comunicación con Madrid a través del tren. Pero las tropas cantonales fueron derrotadas y además de perder medio millar de hombres también perdieron abundante material militar, entre ellos cuatro cañones, doscientos cincuenta fusiles y cincuenta vagones dejando además abierto para las tropas gubernamentales el camino hacia Murcia que fue ocupada el 11 de agosto y su Junta Revolucionaria disuelta. El 14 de agosto una flota gubernamental trató de bloquear el puerto de Cartagena pero fue rechazada por las baterías que defendían el puerto. El 15 de agosto las tropas de Martínez Campos iniciaron el asedio por tierra de Cartagena, un asedio que se prolongaría hasta el 12 de enero de 1874. En estos momentos sólo quedaban dos cantones activos, el de Málaga y el Cantón Murciano en Cartagena. A pesar de ello Martínez Campos sabía que tomaría tiempo ocupar Cartagena y temía que en las Cortes la nueva Constitución federalista diera la victoria a los cantonales antes de que se rindieran. En una carta a Nicolás Salmerón expresaba precisamente sus temores a que "las Cotes voten la Constitución federal o cantonal que les dé el triunfo sin haber ellos arriado la bandera"
Una nueva ilustración del ilustrador y pintor español Daniel Urrabieta Vierge (1851-1904) publicado en enero de 1874 en la revista francesa "Le Monde ilustré" que recrea el bombardeo de Cartagena entre los meses de noviembre y diciembre cuando la situación en la ciudad era ya desesperada. Los bombardeos comenzaron después de que el 14 de noviembre el Ministro de la Guerra José Sánchez Bregua (1818-1897) indicara al general Francisco de Ceballos (1814-1883), responsable del asedio por tierra de Cartagena , que "Sería conveniente arrojar 5000 proyectiles a la plaza porque así se podría quebrantar el ánimo de los defensores o cuando menos molestarles, para no dar lugar a que permanezcan como han permanecido complemtante tranquilos"El bombardeó se inició el 26 de noviembre y ya no se detendría hasta la rendición de la ciudad el 12 de enero de 1874. Si resistieron tantos días es porque se sabía que en cuanto las Cortes reanudaran las sesiones el 2 de enero el presidente Emilio Castelar tendría que afrontar una moción de censura y si caía era posible que la situación mejorara para los insurrectos. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org/ ) |
Entre tanto, Nicolás Salmerón tenía problemas con el general Pavía que pretendía acabar de una vez por todas con el Cantón de Málaga , pero Salmerón no le permitía ocupar la ciudad porque había llegado a un acuerdo con las autoridades cantonales malagueñas en virtud del cual reconocería un alto grado de independencia a la ciudad a cambio de que Málaga también reconociera la autoridad del gobierno. Frustrado, Pavía presentaría su dimisión hasta en dos ocasiones aunque Salmerón la rechazó las dos veces. Por otro lado el ejército presionaba al presidente para que fuera restaurada la pena de muerte y castigar con ella a los soldados insurrectos o que se rebelaran contra sus mandos. Salmerón ,que estaba en contra de la pena capital, trató de oponerse pero no pudo evitar que la propuesta fuera aprobada en las Cortes. El día 5 de septiembre le pusieron sobre la mesa para su firma el documento que incluía la aplicación de la pena de muerte a ocho soldados que en Barcelona habían abandonado sus destinos para unirse a las fuerzas carlistas. Negándose a firmar algo que iba en contra de su conciencia, el 6 de septiembre Nicolás Salmerón presentó su dimisión . En el debate que se produjo aquel día en las Cortes el anterior presidente , Pi y Margall, reprochó al gobierno la forma en que había sido sofocada la rebelión de los cantones "El gobierno ha vencido a los insurrectos - se dirigió a los diputados Margall - , pero ha sucedido lo que yo temía; han sido vencidos los republicanos. ¿Lo han sido los carlistas? No. Mientras ganabais vitalidad en el sur, los carlistas la ganaban en el norte. Yo no hubiese apelado a vuestros medios , declarando piratas a los buques de que se apoderaron los federales; yo no hubiese permitido que naciones extranjeras que ni siquiera nos han reconocido, viniesen a intervenir en nuestras tristísimas discordias . Yo no hubiese bombardeado Valencia. Yo os digo que , por el camino que seguís, es imposible que podáis hacer frente a los carlistas" Al día siguiente, el 7 de septiembre, era elegido como tercer presidente de la República Emilio Castelar , que recordemos que era representante del ala más moderada de los republicanos.
Caricatura de Emilio Castelar realizada por el ilustrador Tomás Padró (1840-1877) para la revista "La madeja política" con el título "En el siglo del progreso , no siempre matar las luces es señal de retroceso" y representa a Castelar, que había asumido la presidencia el 7 de septiembre, apagando la llama de dos velas, la de la derecha en cuya base podemos leer Insurrección ya la izquierda otra vela junto a dos cajas de cerilla donde leemos Navarra y Cataluña y el dibujo de un carlista por lo que la vela representa la Tercera Guerra Carlista. Emilio Castelar detuvo el desarrollo de la Constitución Federal , impresionado por el caos al que había sido arrastrada España por la revolución cantonal en el verano de 1873. Sabía que su política disgustaba a muchos republicanos federalistas, pero como él mismo decía, en una situación de emergencia como aquella no tenía mucho margen de maniobra "Mi política es la natural , y podréis maldecirla , pero no podéis sustituirla"Su caída precipitaría también la caída de la Primera República. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
Decidido a garantizar la unidad del Estado y a poner final al caos en el que se encontraba sumido el 9 de septiembre Castelar solicitaría plenos poderes a las Cortes de la misma forma que lo había hecho Pi y Margall el 30 de junio , y también en esta ocasión le fueron concedidos con la diferencia de que mientras Margall lo solicitó sólo para ser aplicado en Vascongadas y Cataluña, Castelar lo aplicaría a toda España, tanto para acabar con la guerra carlista como con lo que quedaba de la rebelión cantonal. El 19 de septiembre las tropas del general Pavía hacían por fin su entrada en el cantón de Málaga por lo que ya sólo quedaba sin ser sometido el Cantón de Cartagena. El 20 de septiembre Castelar conseguía que se suspendieran las sesiones en las Cortes con el objetivo de detener la redacción de una Constitución federal . A partir de ese momento el presidente gobernaría a través de decretos, sin que sus decisiones tuvieran que pasar por la aprobación de las Cortes . Al asumir la presidencia Castelar había anunciado que "para sostener esta forma de gobierno necesito mucha infantería, mucha caballería, mucha artillería , mucha Guardia Civil y muchos carabineros" y a ello se puso realizando nuevas levas y llamando a los reservistas hasta poner en pie un ejército de 200.000 hombres. Restableció las Ordenanzas Militares que permitieron la aplicación de las penas de muerte que Salmerón no había querido firmar y que causaron su dimisión.Estas decisiones le ganaron el apoyo de los republicanos moderados y el rechazo de los federalistas y del sector más intransigente que lo consideraba una traición al federalismo y al movimiento cantonal, pero Castelar había quedado muy impresionado por lo sucedido aquel verano y no quería que se repitiera porque estaba en juego la unidad de España . Como escribiría más tarde el propio Castelar "Hubo días de aquel verano en que creíamos completamente disuelta nuestra España. La idea de la legalidad se había perdido en tales términos que un empleado cualquiera de guerra asumía todos los poderes y lo notificaba a las Cortes, y los encargados de dar y cumplir las leyes las desacataban sublevándose o tañendo a rebato contra la legalidad. No se trataba allí, como en otras ocasiones, de sustituir un ministerio , ni una forma de Gobierno; tratábase de dividir en mil porciones nuestra patria, semejantes a las que siguieron a la caída del califato de Córdoba."
Grabado que recrea el combate naval de Portman el 11 de octubre de 1873 para la revista inglesa The Ilustrated London News. El combate enfrentó frente al Cabo de Palos, cerca de Cartagena, a la flota del Cantón Murciano bajo el mando del general Juan Contreras y la flota gubernamental dirigida por el contraalmirante Miguel Lobo y Malagamba (1821-1876). La flota cantonal estaba formada por las fragatas blindadas Numancia, Méndez Núñez y Tetuán y el vapor de ruedas Fernando el Católico, mientras que la escuadra gubernamental contaba con las fragatas de hélice Carmen, Almansa y Navas de Tolosa, las goletas de hélice Diana y Prosperidad, los vapores de ruedas Colón y Ciudad de Cádiz y el buque insignia Vitoria. El combate se desarrollaría durante cuatro horas y aunque el número de bajas varía según las fuentes, la escuadra gubernamental tuvo once muertos y treinta y dos heridos y la cantonal ocho muertos y cincuenta y dos heridos .El resultado del combate fue tablas, pues ninguna de las dos escuadras podía considerarse vencedora o derrotada. Dos días después la escuadra cantonal rompería el bloqueo naval hasta que el 23 de octubre este bloqueo se restableció ya de forma definitiva. Al rendirse Cartagena el 12 de enero de 1874 la fragata Numancia junto al vapor Darro llevaría a bordo a 1750 personas rumbo a Orán, en Argelia , entre ellas los líderes de la rebelión que se entregaron a las autoridades francesas en Argelia para escapar al castigo que les esperaba si se quedaban. De esta forma terminaba una confrontación fratricida que sólo puede calificarse como surrealista y absurda. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
Castelar describe en unas líneas el sinsentido que se extendió en aquellos meses por España explicándonos como "de provincias llegaban las ideas más extrañas y los principios más descabellados.Unos decían que iban a resucitar la antigua Corona de Aragón, como si las fórmulas del derecho moderno fueran conjuros de la Edad Media. Otros decían que iban a constituir una Galicia independiente bajo el protectorado de Inglaterra Jaén se apercibía a una guerra con Granada , Salamanca temblaba por la clausura de su gloriosa Universidad y el eclipse de su predominio científico. La sublevación vino contra el más federal de todos los ministerios posibles, y en el mismo momento en que la Asamblea trazaba de prisa un proyecto de Constitución , cuyos mayores defectos provenían de la falta de tiempo en la comisión y de la sobra de impaciencia en el gobierno" Por eso Salmerón decidió detener el proceso de redacción de la Constitución, pues no era posible redactar un texto de tal importancia bajo aquellas terribles presiones. Entre tanto, a partir del 9 de octubre la flota gubernamental inició el bloqueo del puerto de Cartagena que trató de ser levantado por la flota cantonal dos días después en la que sería conocida como batalla de Portman que terminó sin un vencedor claro, pero en todo caso los cantonalistas no lograron romper el bloqueo del puerto. Entre los meses de noviembre y diciembre la ciudad fue sometida a un intenso bombardeo. En los primeros días de enero la situación de Cartagena era ya desesperada mientras Castelar tampoco disfrutaba de unos días plácidos en Madrid debido a las constantes críticas que recibía , sobre todo después del nombramiento de varios generales contrarios a la República y de la apertura de conversaciones con el Vaticano lo que consideraba la ruptura de la separación entre Iglesia y Estado. Agotado por tantos obstáculos, Castelar anunció que "Puesto que soy un dictador estéril , yo os pido, ya que tratáis de sustituirme , que me sustituyáis pronto ,porque si algo me apena es el poder, y si algo me halaga es el retiro" El día 2 de enero de 1874 Salmerón se dirigió a las Cortes, que había reanudado su actividad, para proponer una República "ajustada a la flexibilidad de las circunstancias , transigente con las creencias y costumbres que encuentre a su alrededor, sensata para no alarmar a ninguna clase, fuerte para intentar todas las reformas necesarias, garantía de los intereses legítimos." Y concluía "No hemos salido de la tiranía de los reyes para entrar en la tiranía de los partidos"
La última imagen de esta historia es otra caricatura del ilustrador español Tomás Padró (1840-1877) con el título "La memorable batalla de Pavía" para el número del 24 de enero de 1874 de la revista "La madeja política" que recrea el asalto del general Manuel Pavía al Congreso el 3 de enero de 1874 después de que Emilio Castelar , al que Pavía apoyaba, perdiera la moción de censura que habían presentado los tres presidentes anteriores de la República, Salmerón, Pi y Margall y Estanislao Figueras . Pavía quería formar un gobierno de unidad nacional presidido por Castelar yen el que quedarían excluidos los republicanos intransigentes y los federalistas de Nicolás Salmerón y de Pi y Margall. Pero Castelar se negó porque consideraba que esa forma de actuar era contraria a la democracia. Finalmente ese mismo día se escogería al general Serrano como nuevo presidente y se mantendría en el cargo hasta el pronunciamiento del general Arsenio Martínez Campos el 29 de diciembre de ese año que enterraría lo que quedaba de la Primera República y supondría la restauración de la monarquía en la figura del rey Alfonso XII. (Imagen procedente de https://es.wikipedia.org ) |
Salmerón, Estanislao Figueras y Pi y Margall, los tres que habían sido presidentes de la República, presentaron aquel primer día de reanudación de las Cortes una moción de censura contra Castelar. El presidente sabía desde hacía varias semanas que se estaba preparando un golpe de estado en el caso de que él perdiera la moción de censura y se reune con el general Pavía para tratar de convencerlo de que se mantenga fiel a la legalidad y no se una a los golpistas, pero no logra un compromiso por parte del general aunque lo mantiene en su cargo. La moción de censura contra Castelar se votó en la madrugada del 3 de enero y Castelar fue derrotado por 120 votos a 100. Castelar presenta la dimisión y se propone como nuevo presidente al político valenciano Eduardo Palanca Asensi (1834-1900) . Pavía , que ya había tenido noticia de la derrota de Castelar,envía un escueto mensaje a Nicolás Salmerón donde dice "Desalojen la sala". El golpe de estado estaba en marcha. Salmerón informa a los diputados lo que estaba sucediendo, pero antes de que puedan reaccionar ya estaban entrando en las Cortes la Guardia Civil disparando al aire . Tomado el control de las Cortes, el general Pavía envía un telegrama a los jefes militares de toda España donde les comunica que "El ministerio de Castelar iba a ser sustituido por los que basan su política en la desorganización del ejército y en la destrucción de la patria. En nombre, pues, de la salvación del ejército, de la libertad y de la patria he ocupado el Congreso convocando a los representantes de todos los partidos, exceptuando los cantonales y los carlistas para que formen un gobierno nacional que salve tan caros objetivos" Pavía trató de convencer ahora a Castelar de que se pusiera de nuevo al frente del gobierno pero éste rehusó al considerar que el régimen que Pavía quería establecer era contrario a la democracia. Finalmente se designó al general Francisco Serrano y Domínguez (1810-1885), que ya había sido regente de España entre 1869 y 1871, como nuevo presidente de la República, pero en realidad la I República nacida el 11 de febrero de 1873 había dejado de existir. Nueve días después, el 12 de enero de 1874, Cartagena capitulaba terminando así la Revolución de los Cantones. Al final de 1874, el 29 de diciembre, el general Arsenio Martínez Campos daba un golpe de Estado con el fin de restablecer la monarquía en la persona del príncipe Alfonso de Borbón(1857-1885), el hijo de Isabel II. En enero de 1875 Alfonso regresaba a España y sería proclamado Rey por las Cortes tomando el nombre de Alfonso XII. En 1876 terminaría la Tercera Guerra Carlista con la derrota de los carlistas. Muchas duras pruebas le quedaban a España por delante .La I República resultó un experimento fallido que pudo abrir el camino para una modernización de España, pero el caos en que la sumió la revolución cantonal acabó con las esperanzas depositadas en ella.
Enlace con la primera parte de La revolución de los cantones
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Enlace con la segunda parte de La revolución de los cantones
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