lunes, 16 de febrero de 2015

ERNST SCHÄFER Y LA EXPEDICIÓN NAZI AL TÍBET (TERCERA PARTE)

Es diciembre de 1938 y han pasado siete meses desde que la Expedición Alemana al Tíbet arribara al puerto de la ciudad india de Calcuta. Allí desembarcaron los cinco científicos alemanes que formaban la expedición, empezando por el líder de la misma, el zoólogo Ernst Schäfer (1910-1992) y siguiendo por el antropólogo Bruno Beger (1911-2009), que tenía la intención de tomar todos los datos y medidas necesarios que permitieran establecer la conexión entre el pueblo tibetano , la raza aria y los pueblos nórdicos de Europa, el geógrafo Karl Wienert,  encargado de medir los cambios del campo magnético terrestre en el Himalaya, Edmund Geer, responsable de la intendencia ,y el botánico y entomólogo Ernst Krause, que además de estudiar la gran riqueza natural del Tíbet iba a ser también el responsable de filmar la expedición. Vimos como gracias al apoyo de algunos británicos bien situados en la administración colonial de India y simpatizantes del régimen nazi, el gobernador general y virrey de India, Victor Hope (1887-1952) les concedía el permiso  para quedarse en el pequeño reino de Sikkim que se encontraba entre el Nepal al norte, Bhutan al sureste, el estado indio de Bengala al sur y el Tíbet al este, pero con la prohibición expresa de entrar en el Tíbet. Y así comenzaron su avance hacia el norte, acompañados por un grupo de porteadores que hacía que el número total de personas que integraban la expedición ascendiera a una veintena. En su camino al pequeño reino de Sikkim cruzaron  selvas, campos de arroz y las primeras estribaciones montañosas que anunciaban la proximidad de los Himalaya. Antes de llegar a Sikkim tendrían un primer encuentro con el representante diplomático de Gran Bretaña en Lhasa, la capital de Tíbet, Hugh Edward Richardson (1905-2000) , que coincidió con ellos en la ciudad de Darjeeling y aprovechó para recordarles que no podían entrar en Tíbet.

Quiero incluiros primero este mapa del actual estado indio de Sikkim , que se encuentra en el norte de India, que hasta 1975  fue el reino independiente de Sikkim  que la Expedición Alemana del Tíbet tuvo que atravesar para acceder  al paso de Nathu La que era la puerta a través de la que se podía entrar en Tíbet . Se detuvieron en su camino en Gangtok, la ciudad que veis en la parte inferior derecha del mapa, la capital del reino, donde adquirirían provisiones, contratarían porteadores y mulas para llevar  tanto el equipo como las armas que tendrían que ocultar para que escaparan de la vigilancia de los británicos . Justo debajo de estas líneas os pongo el mapa donde vereis el paso de Nathu La  y el camino hacia la capital del Tíbet , Lhasa (Imagen procedente de   maps.newkerala.com )

 
Nathula pass | Proposed new route for Lhasa
En este mapa a menor escala vemos la situación del paso de Nathu La (pone a su lado la ciudad de Gangtok pero es un error, ya que se encuentra bastante más al sur como podéis ver en el mapa superior) y el camino que conduce a Gyangtse, , la tercera ciudad en tamaño de Tíbet y la ciudad que está a una mayor altura de toda Asia, y a continuación Lhasa, el objetivo final de la expedición , pues era la capital y la sede del gobierno tibetano, donde se encontraba el Palacio de Potala , la residencia del Dalai Lampa, aunque entonces todavía no había sido entronizado y el gobierno estaba en manos del consejo de ministros  (llamado Kashtag) y del regente, el  Reting Rimpoche (Imagen procedente de  http://thinkingparticle.com ) 
Les seguimos acompañando en su periplo por Sikkim, donde Beger comenzó a realizar sus primeros estudios anatómicos de la población local, midiendo sus cráneos, el tamaño de sus orejas, de su nariz y sacando mascarillas de sus rostros mientras Schäfer se convertía  en el primer occidental en ver y cazar un ejemplar de un animal que casi era considerado como una leyenda, el Sathi, aunque todavía hoy es objeto de debate la existencia de esta especie, al menos no he encontrado más información sobre ello . Mientras, en Europa la situación era cada vez más tensa.Si el 12 de marzo de ese año de 1938 se había producido el Anschluss, es decir, la anexión de Austria que se convertía en una nueva provincia del territorio del III Reich alemán, en octubre le tocaba el turno a los Sudetes, el nombre que se daba al territorio de Checoslovaquia que estaba habitado por una minoría alemana y que se extendía por parte de Bohemia, Moravia y Silesia .Entre el 1 y el 10 de octubre de 1938 las tropas alemanas entraron en territorio checo y se hicieron con el control de los Sudetes , unos treinta mil kilómetros cuadrados que también quedaban incorporados a Alemania ante la pasividad de las demás potencias europeas. Los vientos de guerra cada vez soplaban con más fuerza en el Viejo Continente . Esa tensión se reproducía también en las colonias y por eso se había rechazado la solicitud de Schäfer al Foreign Office de permitirles la entrada en Tíbet, pero estaba dispuesto a arriesgarse y hacerlo clandestinamente. Mientras, la Expedición contrata en la capital de Sikkim, Gangtok, mulas , porteadores e intérpretes donde son observados por el representante del gobierno británico Basil Gould (1883-1956) que tenía a su cargo Sikkim, Bhután y Tíbet y entre sus subordinados se encontraba Hugh Richardson, al que había encomendado la representación de los intereses británicos en Tíbet.  Gould describiría al líder de la expedición alemana, Ernst Schäfer, como alguien  "interesante, enérgico, volátil, erudito, vano hasta el punto de resultar infantil e indiferente a las convenciones sociales." También  constató, por los preparativos que hacían los alemanes que iban a cruzar la frontera con el Tíbet ignorando cualquier prohibición. 

Fotografía tomada en 1938 donde podemos ver a los miembros de la expedición alemana al Tíbet junto a Basil Gould , el representante del gobierno británico para el área de Sikkim , Buthán y Tíbet. De izquierda a derecha y empezando por el tercero de la izquierda(el más alto) tenemos al antropólogo Bruno Beger, el líder de la expedición Ernst Schäfer, el británico Basil Gould,  el botánico Ernst Krause que se encargaba también de filmar la expedición, y después de saltarnos a un habitante de la región , le siguen el geógrafo Karl Wienert, que mediría los campos magnéticos de esta zona y  Edmund Geer, responsable de la intendencia de la expedición (Imagen procedente de http://en.wikipedia.org )   
Fotografía de Karl Wienert, el geógrafo del equipo que llevaba consigo un equipo completo para realzar mediciones, desde magnetómetros para medir los campos magnéticos , a barómetros, cronómetros  y una radio de onda corta. (Imagen procedente de http://en.wikipedia.org)
Avancemos ahora hasta el mes de diciembre cuando se dirigen hacia el l paso de montaña que comunica Sikkim con Tíbet, el Paso de Nathu La o de "Paso de los oídos atentos", situado a 4310 metros de altura, utilizado desde la antigüedad por los que recorrían la Ruta de la Seda. El grupo es azotado por vientos helados que hacen todavía más difícil la ascensión por el empinado camino que lleva hasta el Paso. Además ellos mismos se hacen pasar por turistas en un intento de evitar ser detenidos, escondiendo las armas y su equipo en los fardos que cargaban las mulas que adquirieron en Gangtok. Salvado el Paso , descienden hasta el Valle de Chumbi, situado justo en la intersección entre los territorios de Sikkim, Bután y Tíbet  y , por fin, entran en territorio tibetano. Parece que fue después de entrar en territorio tibetano, aunque también he encontrado otras fuentes que dicen que fue antes, cuando la expedición recibió una invitación  del consejo de ministros tibetano, el Kashag, para que se desplazaran libremente por el país y acudieran a Lhasa donde les esperaba el regente del Tíbet,  Jamphei Yeshe Gyaltsen (1910-1947), el hombre que ostentaba el cargo de Reting Rimpoché, en espera que de que fuera entronizado oficialmente el décimo cuarto lama, Tenzyn Gyatso(1935),  que apenas tiene cuatro años en ese momento. Hicieron un alto en el camino y se envió  gente a Gangtok para comprar provisiones antes de seguir la expedición,  y así se enteraron que habían sido ascendidos en el escalafón de las SS a la que ya sabemos que  pertenecían todos ellos . En lo que a Schäfer respecta  ahora tenía el grado de Hauptsturmführer, equivalente al de capitán, mientras que sus cuatro compañeros eran ahora Obersturmführer, que es comparable al grado de teniente. Después de estas alentadoras noticias para la expedición, prosiguieron la marcha adentrándose en Tíbet. 

Fotografía actual de la entrada al paso de Nathu La , situado a 4310 metros de altura,  donde hoy se encuentra la frontera entre India y China mientras que en 1938, cuando lo atravesó la Expedición Alemana, separaba el reino de Sikkim, del reino de Tíbet  (Imagen procedente de www.tripadvisor.in )

El botánico y entomólogo Ernst Krause con una de las cámaras con las que filmaría toda la expedición . En total rodaría más de 18.000 metros de película, que reuniría en el documental "El Tíbet secreto"(Geheimnis Tíbet) y 40.000 fotografías, tanto en blanco y negro como en color  (Imagen procedente de http://en.wikipedia.org )


Escribe Joseph Cummins  en su obra "Grandes episodios desconocidos de la historia" que "En las semanas siguientes , la expedición descendió a la meseta  principal del Tíbet (que tienen una altura media de 3000 metros) donde penetraron en valles arbolados salpicados de pequeños pueblos  y monasterios. El área tenía un aire pintoresco  que a los alemanes les recordó a los Alpes lo que reforzó las ideas de Bruno Beger  de una cultura aria común" Aún así tenía que seguir ocultando su equipo y las armas ya en el Tíbet había consulados británicos y sabían que los observarían. Se detuvieron en Gyantse , la tercera ciudad en importancia de Tíbet después de la capital , Lhasa , y de Shigatse, y la que está a mayor altura de toda Asia, a 3836 metros de altura. Allí contemplaron por primera vez un símbolo que encontrarían con frecuencia durante su estancia en la región, la Yungdrung, el nombre que recibían en tibetano las cruces gamadas o esvásticas . Los miembros de la expedición no dudaron en señalar a los tibetanos esta similitud para encontrar así un punto de coincidencia que les permitiera ganarse sus simpatías. Durante su estancia en la ciudad recibirán la visita de nuevo del representante británico en Tíbet, al que ya hemos conocido, Hugh Edward Richardson, con el que parece que mantuvieron un encuentro tenso pero les permitió continuar su camino recordando que tenían prohibida su entrada en Lhasa, una prohibición que los alemanes no tenían ninguna intención de respetar. Ya en el mes de enero prosiguen su camino "pasan por las ciudades tan rápido como pueden - escribe Cummins - ya que las encuentran sucias y repugnantes, con calles llenas de mendigos y enfermos mentales de los que nadie se ocupa y que en general están hambrientos" El camino es duro, es pleno invierno  y las temperaturas descienden por debajo de los quince grados bajo cero.  

Fotografía tomada por la Expedición a s u paso por la ciudad de Gyantse, la tercera ciudad en importancia de Tíbet y la que se encuentra a mayor altura de toda Asia. ,nada menos que a 3836 metros de altura . Situada a 254 kilómetros de Lhasa, tiene una posición estratégica en la ruta de paso entre el interior del Tíbet e India . En 1390 se construyó una fortaleza para protegerla y  estaba rodeada por una muralla de tres kilómetros de longitud. Hacia 1950 la población de Gyantse era de unas ocho mil personas, un número no muy diferente al que debía tener en 1939 cuando pasaron por ella los miembros de la Expedición Alemana camino de Lhasa. Hoy la población de Gyantse asciende a más de 60.000 personas  (Imagen procedente de http://fr.wikipedia.org )
Fotografía tomada durante la expedición de Edmund Geer, el único de los cinco que siendo miembro de las SS no tenía rango de oficial , aunque a lo largo de la expedición sería ascendido al grado equivalente a teniente como sucedió con el resto de los miembros de la expedición excepto  Ernst Schäfer que llegaría al grado de capitán . Como ya hemos visto, Geer se encargaría de la logística de la expedición  procurando que hubiera de todo, desde cerveza y cigarrillos  hasta las tiendas de campaña. No he podido encontrar información sobre su vida después de la Expedición y la guerra , al igual que me ha sucedido con Krause  y Wienert, excepto una escueta referencia a que siguieron con sus vidas académicas  (Imagen procedente  de http://en.wikipedia.org )

Escribiría después Bruno Beger en su informe  "El estatus de independencia de Tíbet entre 1938 y 1939 de acuerdo con los informes del recorrido"  lo bien que habían sido recibidos por las diferentes localidades por las que pasaban , probablemente por ordenes de Lhasa que ya habían avisado del paso de la expedición alemana "La llegada de nuestra expedición - escribe Beger- había sido anunciada por adelantado , y por esa razón fuimos bienvenidos en todas partes y provistos de las cosas necesarias en nuestro camino a través del Valle de Chumbi . después hasta Gyantse y desde allí a Lhasa."Por fin el 19 de enero de 1939 la Expedición Alemana llegaba a la capital tibetana, la ciudad de Lhasa. La ciudad , situada a 3650 metros de altura, la segunda más alta de Asia después de Gyantse, y emplazada en el valle del río Brahmaputra, era la capital política de Tíbet desde el gobierno del quinto Dalai Lama, Lobsang Gyatso (1618-1682) bajo cuyo gobierno se construyó el más célebre de los edificios y monumentos tibetanos, el Palacio de Potala , al menos la parte conocida como Potrang Karpo o Palacio Blanco al que durante el gobierno del sexto Dalai Lama , Tsangyang Gyatso (1683-1706), se añadiría el Potrang Marpo o Palacio Rojo. El Palacio de Potala sería la residencia oficial de los Dalai Lama hasta que el décimo cuarto Dala Lama , Tenzyn Gyatso , tuvo que abandonar Tíbet y marchar al exilio en 1959.  En Lhasa fueron igualmente bien recibidos aunque Cummins escribe que "Entraron por la puerta oeste y los recibieron tibetanos que aplaudían, lo que animó a Schäfer, hasta que los porteadores le dijeron que lo hacían para librar a la ciudad de los espíritus diabólicos que sin duda los extranjeros habían traído consigo" 

Fotografía del Palacio de Potala  erigido sobre la montaña de Hongshan o Monte Rojo, a 3650 metros de altura en la ciudad de Lhasa . El nombre de Potala procedería del sánscrito, la lengua clásica de India, y significaría "Isla donde vive el Buda de la misericordia" y en la fotografía podéis ver los dos palacios.  Aunque el palacio original comenzó a construirse en el siglo VII cuando el Tíbet se constituyó como un reino unificado bajo el gobierno de Songtsen Gampo (hacia 605- hacia 650), pero cuando en el siglo IX el reino se divide en múltiples principados se iría deteriorando . Fue en el siglo XVII cuando comenzó su reconstrucción  y adoptó la forma que vemos en la fotografía. El más antiguo es el Palacio Blanco o Potrang Karpo , construido a mediados del siglo XVII bajo el gobierno del quinto Dalai Lama , Lobsang Gyatso(1618-1682) que se convertiría en la residencia personal del Dalai Lama , y a continuación se construiría el Palacio Rojo  o  Potrang Mapo  durante el gobierno del sexto dalai lama Tsangyang Gyatso, que es la zona dedicada a lo oración  y el estudio además de albergar las tumbas de los diferentes Dalai Lama , bibliotecas o la sala de asambleas. Tiene una altura de trece pisos ,110 metros de altura desde su base ,  130.000 metros de superficie construida  y muros de granito que alcanzan hasta los cinco metros de grosor . Desde el año 1994 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (Imagen procedente de mupart.uv.es )

Fotografía de Bruno Beger junto al regente del Tíbet , el Reting Rimpoché , Jamphei Yeshe Gyaltsen (1910-1947). En 1941 Jamphei sería sustituido en la regencia por  el Taktra Rinpoche, Ngawang Sungrab Thutob (1874-1952) . Jamphei se opuso a esta sustitución y finalmente sería detenido y encarcelado muriendo en prisión en 1947. Sobre la vida de Bruno Bege después de la expedición os hablo más abajo de ella, pero estaría relacionada con los campos de exterminio por lo que sería juzgado muchos años después del final de la guerra, en 1974 (Imagen procedente de http://fr.wikipedia.org )

En todo caso fueron bien acogidos y se reunieron tanto con el Khalag, el consejo de ministros como con el regente , el Reting Rimpoché. Fruto de esas buenas relaciones se prorrogó su permiso de estancia en Tíbet, inicialmente de sólo quince días, ampliándolo hasta los tres meses ante el disgusto de los británicos que se veían impotentes para expulsarlos ya que tenían el permiso de las autoridades tibetanas, aunque trataron de dificultar lo más posible su estancia en Tíbet denunciado cualquier actividad científica que observaban ya que habían sido admitidos como viajeros o turistas, no como científicos, aunque tanto para el regente como para el Kashag el grupo de alemanes era considerado como una delegación enviada por el gobierno alemán  y Reting Rimpoche llegó a solicitar a Schäfer que transmitiera a Hitler su deseo de recibir armamento de Alemania que le permitiera combatir la constante amenaza de invasión que representaba China, a la que ahora también se unía la amenaza del Imperio  Japonés que había puesto los ojos sobre este territorio e incluso durante la estancia de la expedición alemana coincidieron con un espía japonés que había sido enviado a Tíbet. Schäfer no podía acceder a la petición del regente porque sabía que estaba siendo observado por los británicos y los chinos una respuesta afirmativa le habría ocasionado muchos problemas para poder salir del país. Durante los siguientes meses Beger realizó su trabajo , tomando las medidas, según  relata Cummins,  de centenares de tibetanos. Al final de la expedición habría  recopilado información de cuatro centenares de tibetanos, tomado trescientas cincuenta huellas digitales, dos millares de fotografías y alrededor de  veinticinco mascarillas o moldes faciales.

DOCUMENTAL DE NATIONAL GEOGRAPHIC SOBRE LA EXPEDICIÓN AL TÍBET

No he podido bajar los vídeos  de este documental de National Geographic sobre la expedición alemana al Tíbet pero os dejo los enlaces para que podáis verlos. La imagen no es demasiado buena , pero creo que es útil para que tengáis una información más completa. 

1ª Parte: https://www.youtube.com/watch?v=gclEA_lV4lY
Parte: https://www.youtube.com/watch?v=CvDPOFoGiFg
3º Parte: https://www.youtube.com/watch?v=rtE_52CUiLI
4º Parte: https://www.youtube.com/watch?v=jYDmb384kHI
5º Parte: https://www.youtube.com/watch?v=IZ1nigmRvV4

Fotografía tomada durante la estancia de la Expedición Alemana en Lhasa  entre los meses de enero a marzo de 1939, sentados junto a algunas dignidades tibetanos y también algunos representantes chinos en Tíbet . Fijaos e el banderín con la esvástica en la pared y los emblemas de las SS. El segundo por la izquierda es Bruno Beger, el cuarto por la izquierda es Geer, a continuación en el centro  el diplomático tibetano y consejero del anterior Dalai Lama, Tsarong Dzasa (1888-1959), y a su lado Ernst Schäfer (Imagen procedente de http://fr.wikipedia.org )
Más tarde  Beger escribiría sobre sus observaciones acerca del pueblo tibetano que  eran "altos, de cabeza alargada, con el rostro alargado , los pómulos retraídos, la nariz recta o ligeramente curva con el dorso nasal elevado, el cabello lacio y un comportamiento imperioso que denota seguridad" Para Beger era la confirmación de la conexión entre los tibetanos y la raza aria y, por tanto, con los pueblos nórdicos europeos, aunque para mi lo que hace es confirmar las palabras del escritor francés Jean de La Fontaine (1621-1695) acerca de que "·El hombre cree con facilidad aquello que teme o que desea" y es evidente que Beger estaba muy predispuesto a encontrar esa conexión aunque no existiera. Los demás miembros de la expedición tampoco estuvieron con los brazos cruzados , Krause filmaba miles de metros de película que luego se convertirían en el documental "Tibet Geheimns", "El Tíbet secreto", que se estrenaría en Alemania en 1942, además de más de cuarenta mil fotografías. Schäfer se dedicaba a su actividad favorita, la caza, abatiendo todo tipo de animales para llevar sus pieles a Alemania, según Cummins en un número superior a los tres mil ejemplares y Karl Wienert realizaba a sus mediciones del campo magnético de la Tierra en la región, recogiendo además semillas de más de cincuenta variedades nuevas de plantas con las que luego se experimentaría en Alemania. Al mismo tiempo seguían en contacto con Alemania a través de la radio, dejando muy satisfecho a Himmler con los avances  e investigaciones que realizaban sobre el terreno y más aún porque lo hacían ante la mirada impotente de los británicos  que no podían intervenir. Durante su estancia tuvieron la oportunidad de asistir a la celebración del Año Nuevo Tibetano. Y así llegamos al mes de marzo de 1939, cuando Adolf Hitler ordena la ocupación del resto de Checoslovaquia después de que los Sudetes estuvieran en su poder desde el mes de octubre, como ya habíamos visto antes. La guerra ya parecía sólo cuestión de tiempo y Schäfer decidió que era el momento de abandonar el Tíbet y regresar a Alemania mientras estuvieran a tiempo o se arriesgaban a quedar atrapados allí por los británicos. 

Cartel del documental "Geheimnis Tíbet" o "El Tíbet secreto" , el documental grabado en el transcurso de la expedición y estrenado en 1942. Además de sacar imágenes  de los paisajes y las tradiciones tibetanas también aprovecharon  la oportunidad para criticar a los británicos a los que acusaban de explotar al Tíbet y también críticas  contra el budismo tibetano al que calificaban de una religión degenerada  que había corrompido a la antigua raza tibetana que en su imaginación estaba emparentada con la raza aria . Era también una forma de establecer un paralelismo con los alemanes que estarían en peligro de ser contaminados por los judíos y otras de las calificadas por los nazis como razas inferiores. En la actualidad el documental se conserva  en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos (Imagen procedente de www.docmasters.tv ) 


Antes de marcharse el Reting Rimpoche les entregó una carta para Hitler y un perro de regalo que no llegaría con vida a Alemania. El 20 de marzo emprendieron el camino de regreso  en dirección a  la segunda ciudad en importancia de Tíbet, Shygatse,  para desde allí dirigirse otra vez a Gyantse para desde allí retornar a Sikkim  y pasar  a India hasta Calcuta donde Himmler habría enviado unos hidroaviones que los trasladarían a  Bagdad y desde allí en avión hasta Alemania. Por fin, el 4 de agosto de 1939 los cinco miembros de la expedición aterrizaban en Munich donde fueron recibidos como héroes por Heinrich Himmler . Los periódicos trataron a todos ellos como celebridades  pero muy pronto su historia pasó a un segundo plano  porque el 1 de septiembre de ese año las tropas alemanas iniciaban la invasión de Polonia dando comienzo a la Segunda Guerra Mundial. Mientras que Geer, Wienert y Krause parece que se mantuvieron al  margen, trabajando dentro del mundo académico,  Ernst Schäfer siguió vinculado a la Ahnenerbe , donde según Cummins llegaría a ser director del departamento de Investigación de Asia  y habría trabajado con otros científicos en el desarrollo de nuevas variedades de cultivo derivadas de las semillas traídas de la expedición del Tíbet con el objetivo de adaptarlas para el cultivo en Ucrania  que había sido ocupada por la Alemania nazi. También habría defendido la idea de ocupar  la India británica aliándose con los tibetanos . En cuanto a Beger , aunque se esforzó, no pudo escribir un informe en el que pudiera establecer con claridad la conexión entre los tibetanos y la raza aria y se limitó a hacer una descripción  de la diversidad étnica del Tíbet, por lo que en ese aspecto, dar un argumento científico a la creencia en la superioridad y pureza racial aria, la expedición fue un fracaso. 

Fotografía de Ernst Schäfer tomada por el ejercito estadounidense durante  los Juicio de Nüremberg donde Schäfer fue absuelto sin ningún cargo y unos años más tarde, en 1950 , viajaría a Venezuela donde permanecería cinco años antes de regresar de nuevo a Alemania donde permanecería hasta su muerte en 1992. El último miembro de la expedición  con vida fue Bruno Beger que moriría en 2009 (Imagen procedente de http://en.wikipedia.org ) 

Beger fue el único de los cinco miembros de la expedición que si estuvo implicado en la política de exterminio desde su puesto como profesor en la Reichuniversität de Estrasburgo, una institución fundada por los nazis en la Francia ocupada . Allí fue ayudante del doctor August Hirt (1898-1945) y entre ambos tuvieron entre sus tareas la de reunir una colección de muestras anatómicas de judíos. Para ello Beger viajó al campo de exterminio de Auschwitz  donde seleccionó a un grupo de 115  personas, setenta y nueve hombres y  treinta mujeres,  todos ellos judíos, además de dos polacos  y cuatro hombres que fueron escogidos por tener rasgos asiáticos. Beger realizó  mediciones de todos ellos de la misma forma que lo había hecho durante la Expedición al Tíbet , y después se marchó. Los seleccionados por Beger fueron enviados a la cámara de gas y sus cuerpos remitidos al laboratorio de Hirt en la Reichuniversität de Estrasburgo. Al terminar la guerra August Hirt iba a ser juzgado por genocidio pero antes de que se celebrara el juicio se suicidó el 2 de junio de 1945, mientras que de Beger nadie se ocupó hasta muchos años más tarde. Sería finalmente juzgado en 1974  acusado de ser responsable de la muerte de los internos asesinados en la cámara de gas después de que hubieran sido seleccionados por él. Fue condenado a sólo tres años de prisión aunque no llegaría a ingresar en prisión sin que haya podido encontrar las razones de una pena tan leve y de su no encarcelamiento. Beger moriría el 12 de octubre de 2009.  En cuanto a Schäfer sería detenido, interrogado y juzgado por los aliados , pero no estaba implicado con lo sucedido en los campos de exterminio por lo que fue puesto en libertad y en 1950 se trasladó a Venezuela  con su segunda esposa, con la que tendría  tres hijos, y allí abrió una reserva de fauna.. Regresaría a mediados de los años cincuenta a Alemania donde moría el 21 de julio de 1992 . Y aquí concluye la historia de la Expedición Alemana al Tíbet que si fue un éxito en la recopilación de datos científicos fue un fracaso a la hora de respaldar los delirios racistas y ocultistas que habían animado a Himmler a organizar aquella expedición en la que los científicos actuaron como cómplices  del régimen nazi. Como escribe Cummins " por intentar otorgar una apariencia de respetabilidad  y un aire de autoridad científica  a teorías no demostradas , los científicos pueden ayudar a convertir ideas peregrinas en una realidad destructiva" En cuanto al Tíbet que habían conocido como un estado independiente, perdería su independencia de forma definitiva en 1959, cuando el Dalai Lama tuvo que huir al exilio. Pero esa es ya otra historia que espero contaros en otra ocasión.  

Enlace con la primera parte de Ernst Schäfer y la expedición nazi al Tíbet
http://chrismielost.blogspot.com.es/2015/02/ernst-schafer-y-la-expedicion-nazi-al.html

Enlace con la segunda parte de Ernst Schäfer y la expedición nazi al Tíbet
http://chrismielost.blogspot.com.es/2015/02/ernst-schafer-y-la-expedicion-nazi-al_15.html


El Mentidero de Mielost en Facebook :
 https://www.facebook.com/ElMentideroDeMielost

2 comentarios:

Sand dijo...

Estupendo tu relato como siempre Christian. Una observación muy personal es que en pleno siglo XXI aún es común constatar que se empeñar en mantener peleados a la leyenda y la tradición oral, así como a la cosmovisión religiosa con la ciencia. Los historiadores, arqueólogos y antropólogos contemporáneos han demostrado que se pueden desvelar muchos más misterios siguiendo el hilo de la leyenda, que ignorándola y tildándola de superchería o mera imaginación de la gente, es así que llenos de estupor comprobaron (por citar uno de tantos ejemplos) que la estrella Sirio es en realidad un sistema binario o posiblemente trinario, cosa que los Dogón de África ya sabían desde hace cientos de años e incluso lo dibujaban perfectamente pues así se los habían indicado sus "dioses". En cuanto a la creencia de los nazis acerca del origen de los arios, sería muy largo de explicar aquí pero no estaban tan errados, lo cual por supuesto no les daba derecho a cometer las atrocidades que todos conocemos. Yo como dijo el sabio filósofo griego "Sólo sé que no se nada" pues lo que creo saber resulta que sólo es la punta del icberg o aún menos, jejejejeje.
Continuemos pues investigando, ya que la verdad nos hará libres. Un fuerte y admirado abrazo desde la ciudad de México.

christian mielost dijo...

Muchas gracias por el comentario y la lectura Sand!!Que lectora más fiel!!jaja Estoy de acuerdo contigo en lo que se refiere a que detrás de los mitos y las leyendas suele haber un poso de realidad que luego se ha ido transformando por el paso del tiempo, pero merece la pena investigarlo.

Un ejemplo lo tenemos con la guerra e Troya que luego Homero, siglos más tarde , convirtió en un poema épico y aunque lo que cuenta en la Iliada es probable que tenga poco que ver con los acontecimientos históricos si hubo una ciudad de Troya (en realidad varias superpuestas a lo largo de los siglos) y también una destrucción de la ciudad por el fuego .

Sobre los arios, en efecto es cierto que las lenguas indo arias se extendieron después hacia Europa,lo que no eran es una raza como afirmaban los nazis para reforzar sus teorías racistas , es más hoy en día los científicos ya no hablan de razas porque al margen del color de la piel todos compartimos el mismo código genético.

Llevo tiempo pensando en escribir sobre el pueblo ogón pero todavía no he leído bastante sobre ello así que tendré que esperar. Y comparto plenamente el "Solo sé que no se nada", somos amigos de Sócrates jaja.

Un abrazo muy fuerte desde Madrid!!

Famosos